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Los alicantinos pagan más impuestos municipales

> Cada residente de la provincia abona una media de 398,9 euros a su ayuntamiento

La presión fiscal de los ayuntamientos alicantinos es más elevada que la media nacional. En concreto, según los cálculos incluidos en el Balance socioeconómico de la provincia. 2003-2013, cada residente de la zona paga hasta un 6% más a su consistorio que los del resto del país debido a que éstos aplican mayores impuestos y tasas.

De esta forma, frente a la media de 376,1 euros que debe abonar cualquier español para mantener los servicios que le presta su municipio, un alicantino paga 398,9, casi 23 euros más. El consuelo es que, de acuerdo con este mismo estudio, en el resto de la Comunidad Valenciana aún resulta más caro, ya que se pagan 404,4 euros anuales.

Si se compara la evolución a lo largo de la década que comprende el análisis, el resultado es que la recaudación de los consistorios alicantinos se incrementó casi un 50% durante este tiempo, lo que supuso pasar de unos ingresos conjuntos de 434,6 millones de euros a algo más de 776 millones. Se trata de un incremento muy considerable fruto del aumento de la renta que ha experimentado la población pero, también, del aumento de la presión fiscal que muchos ayuntamientos han aprobado para hacer frente a las consecuencias de la crisis.

No obstante, también cabe señalar que este incremento ha sido menor que el experimentado a nivel autonómico (+56,8%) y a nivel nacional (+64,6%), lo que ha reducido la distancia entre Alicante y la media, que en el año 2003 llegaba al 16,4%.

En el desglose por impuestos, se observa que los gravámenes que aplican los municipios de la provincia son mayores en todos ellos. En el caso del Impuesto de Bienes Inmuebles el coeficiente medio que aplican los consistorios de la zona alcanza el 0,79% frente al 0,65% de la media nacional.

También los propietarios de vehículos pagan más. El recibo medio para los turismos de menos de ocho caballos de potencia es de 17,32 euros frente a los 15,61 de la media, y los que tienen entre 12 y 15,99 pagan 98,94 euros frente a los 88,72 del conjunto del país.

Y lo mismo ocurre con los tipos mínimos y máximos del Impuesto de Actividades Económicas (ver gráfico) y con el que se aplica al Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras.

Un aspecto que llama la atención es que el aumento de la recaudación municipal a lo largo de los años analizados no se ha correspondido con un incremento de la inversión municipal. Al contrario, si en 2003 se cifraba en unos 250 euros per cápita, en 2013 no llegaba a los 50 euros.

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