A estas alturas ya se da por hecho en círculos empresariales que la salida de Moisés Jiménez de Coepa es cuestión de tiempo -de poco tiempo- y que quien asumirá las riendas será su vicepresidente y presidente de la Asociación de la Empresa Familiar de Alicante, Francisco Gómez. Sin embargo, el conseller de Economía, Rafa Climent, no quiso entrar mucho en estas cuestiones, aunque se ratificó -de forma elegante, eso sí- en que lo mejor que le puede pasar a la patronal es que Jiménez deje el cargo. «Es una cuestión del empresariado, y quien debe resolver sus problemas es Coepa, pero queremos un interlocutor potente y válido, y paz y tranquilidad para trabajar, porque eso es lo que necesitan los empresarios, y así se lo hemos hecho saber al presidente y al vicepresidente de Coepa», subrayó Climent, en alusión a la reunión mantenida en Valencia el pasado viernes. El exalcalde de Muro dijo eso, y admitió que confía en que el cambio se produzca más pronto que tarde. Por su fuera poco, admitió que el Consell no está dispuesto a admitir salidas de tono. «No vamos a aceptar declaraciones que vayan contra la cohesión social y territorial», afirmó, por las declaraciones de hace unas semanas de Moisés Jiménez. m. p.