Los recortes que han ejecutado las administraciones públicas durante los últimos cuatro años han tenido un impacto más que significativo en el mercado laboral de la provincia. Según denuncia un informe elaborado por CC OO en base a la última Encuesta de Población Activa, las dificultades financieras por las que han pasado los ayuntamientos y el Consell, y la necesidad de reducir el déficit para cumplir con las exigencias de nuestros socios europeos han destruido hasta 23.100 empleos públicos en Alicante, prácticamente uno de cada cinco de los que existían a finales de 2011.
Una reducción de plantilla que el responsable de Empleo del sindicato en l'Alacantí, José María Ruiz Olmos, califica de «salvaje» y que, a su juicio, está detrás de la pérdida de calidad que han sufrido la mayoría de los servicios públicos a lo largo de estos años.
Ruiz Olmos destaca que una parte importante de estos recortes ha llegado por la política del Gobierno de prohibir la reposición de plazas de los funcionarios que se jubilaban, una práctica que en la provincia ha afectado especialmente a los trabajadores de las delegaciones que tiene la Administración central del Estado.
Sin embargo, otra parte significativa ha venido por la supresión de empleos temporales e, incluso, mediante los despidos que se han dado en muchas empresas públicas, que tuvieron en el cierre de Canal 9 su máximo exponente. En el primero de los casos se encuadran, por ejemplo, las menores contrataciones de interinos en Educación o los recortes del número de enfermeras y auxiliares en los centros de salud y los hospitales de la provincia, donde se han cerrado plantas completas, tal y como recuerda el portavoz de CC OO.
Además de las consecuencias lógicas de cualquier reducción de personal, como la sobrecarga de trabajo o la menor capacidad para atender a los ciudadanos, los recortes han sido tan profundos que han cambiado incluso el sexo de la Administración en la provincia. Si tradicionalmente se trataba de un sector altamente feminizado, donde las mujeres eran mayoría; ahora se han cambiado las tornas y son los hombres el sexo mayoritario entre los trabajadores públicos.
El motivo es que las mujeres eran más numerosas pero también eran las que ostentaban los empleos más precarios del sector público y, por tanto, también las más afectadas por estos recortes. Así, de los 23.100 puestos de trabajo que se han suprimido, hasta 18.500 los ocupaban mujeres, según el citado informe. Una forma más de «discriminación», en palabras del portavoz del sindicato.
Plan de rejuvenecimiento
Frente a esta situación, desde CC OO exigen un plan de rejuvenecimiento de las plantillas públicas para los próximos años que garantice, no sólo la reposición de los funcionarios que se jubilen, sino también la recuperación de las plazas perdidos. Recuerdan, además, el aumento de las plantillas en Sanidad o Educación no son un gasto, sino una inversión que también contribuye a generar riqueza.
