El Banco Santander obtuvo un beneficio atribuido ordinario de 5.106 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que supone un aumento del 17% con respecto al mismo período de 2014, según informó este jueves la entidad, que subrayó que los diez principales mercados en los que opera presentan crecimiento en su beneficio, con la excepción de Polonia, donde cayó un 7%. El banco destacó que está avanzando en el cumplimiento de los objetivos que se ha marcado en su plan estratégico a tres años y que permitirá elevar el beneficio por acción y el dividendo año tras año.
La entidad presidida por Ana Botín explicó que los nueve primeros meses del año presentan un «destacado» crecimiento de la actividad y de los ingresos, que además se ven apoyados por el favorable impacto de los tipos de cambio, ya que la apreciación de la libra y el dólar en sus cuentas supera al impacto de la depreciación del real brasileño. Las dotaciones para insolvencias restan 7.550 millones de euros al margen neto del grupo lo que supone un 7% menos que hace un año.
Este descenso de las provisiones, explicó la entidad, es determinante para que el beneficio atribuido ordinario alcance 5.106 millones, con una mejora del 17%, variación que sería del 12% sin el impacto de la variación de las divisas.
Por otro lado, el consejero delegado del banco, José Antonio Álvarez, reafirmó la estrategia de la entidad de cobrar unos dos euros por usar sus cajeros automáticos aunque, tras la nueva normativa aprobada por el Gobierno, no será el cliente quien directamente deba abonar esta cantidad, sino el banco emisor de la tarjeta. «No hay cambios sobre lo que habíamos anunciado», afirmó Álvarez al ser preguntado sobre esta cuestión. El Santander había avanzado que implantaría esta nueva estrategia en septiembre u octubre de este año.
Álvarez aprovechó para señalar que el tema de los cajeros «se ha magnificado» porque existe una amplia red de cajeros en España. «La lógica es aplastante», enfatizó para defender la legitimidad del propietario de cobrar una tasa por el uso de sus cajeros.
Interés por Bankia
El consejero del Santander dio ayer por cerrado tanto el ajuste de empleados y oficinas por la fusión con Banesto como los cambios directivos y se mostró abierto a comprar alguna entidad si se produce otra oleada de fusiones en España. Preguntado por su posible interés por comprar Bankia, el «número dos» de la entidad se ha limitado a valorar la gestión del banco nacionalizado pero señaló que el tema «ni está en la mesa ni sé si va a estar».
