Trabajadores de la aerolínea francesa Air France tomaron ayer la sede del grupo y agredieron a varios miembros de la dirección en el momento en el que desgranaban su plan de ajuste, que incluye el despido de 2.900 empleados, los primeros de la historia de la compañía. Mientras que el presidente de Air France, Frédéric Gagey, abandonaba de forma precipitada el lugar al ver entrar a los trabajadores, éstos rodearon al director de Recursos Humanos, Xavier Broseta, a quien desgarraron la camisa.

De hecho, varios directivos tuvieron que huir descamisados escalando vallas, después de que varios centenares de trabajadores irrumpieran en la reunión entre ejecutivos y representantes sindicales que se estaba celebrando en la sede de la empresa en el aeropuerto Internacional Charles De Gaulle al grito de «Jouniac dimisión», en referencia al presidente de la compañía, Alexandre de Juniac. Las imágenes que se tomaron de ese momento, no en vano, muestran a varios individuos con la vestimenta de traje descompuesta y a uno de ellos, el responsable de Recursos Humanos de la compañía, escalando una valla ya sin camisa. La dirección condenó esos hechos y anunció que presentará una denuncia por «violencia agravada».

Los sindicatos de la aerolínea habían convocado una jornada de paros que tuvo poca incidencia en el tráfico de la compañía, y una manifestación en las puertas de la sede social de Air France. En el interior se reunía el comité de empresa, en el que la dirección explicaba a los representantes sindicales sus planes de ajuste, que pasan por la reducción de un 10% de su oferta de vuelos, lo que se traducirá en la supresión de 2.900 puestos. Un grupo de trabajadores logró superar las barreras de seguridad que les impedían la entrada al lugar, lo que provocó la suspensión del comité, hasta el punto de que eso degeneró en incidentes con algunos miembros de la dirección.

Ante la creciente competencia de las compañías de bajo coste en sus vuelos de corta y media distancia y de las aerolíneas del Golfo en los de largo recorrido, Air France puso en marcha un plan de incremento de la productividad que pretendía consensuar con los sindicatos.