El monte de piedad de la Fundación Montemadrid -la antigua Caja Madrid- confía en captar más de 15.000 clientes con el nuevo establecimiento que ayer inauguró en la calle Álvarez Sereix de Alicante, el primero que la institución abre fuera de su comunidad autónoma de origen. Así lo explicó su director general, Santiago Gil, durante un acto al que también acudieron el director general del Instituto Valenciano de Financias, Manuel Illueca, y el de la propia Fundación, José Guirao, además de varios concejales.
De esta forma, la provincia recupera un servicio que perdió hace ya más de 25 años, cuando la CAM decidió cerrar el monte de piedad que tenía en la avenida de Alfonso el Sabio, tal y como avanzó este diario el pasado 15 de septiembre.
Este tipo de establecimiento permite solicitar pequeños créditos -desde un mínimo de 50 hasta un máximo de 30.000 euros- a cambio de dejar en prenda una joya y pagar un interés anual que oscila entre el 5% y el 8,25%. El proceso es muy sencillo y en apenas quince minutos el cliente puede salir del local con el dinero que necesita ya que el personal que atiende al público son gemólogos expertos que pueden realizar las tasaciones de las joyas en el acto. Además, el establecimiento también posee un pequeño laboratorio para los casos algo más complicados.
Las joyas empeñadas se guardan en el propio local, que dispone de una cámara con cajas fuertes de máxima seguridad. De hecho, según sus responsables, en Madrid es frecuente que muchos clientes utilicen el Monte de Piedad para depositar sus posesiones más valiosas cuando se marchan de vacaciones y no va a quedar nadie en casa. No obstante, el cliente tipo es el de una mujer de clase media-media o media-baja que necesita liquidez. El 95% de los usuarios recuperan sus joyas y sólo un 5% acaban en las subastas mensuales que organiza la institución.
