El juez de la Audiencia Nacional que investiga el presunto saqueo de la CAM tiene en su poder un listado de 55.000 clientes de la caja que compararon cuotas participativas y que ahora las tienen depositadas en el Sabadell. El banco catalán ha remitido un CD al magistrado con estos datos después de que el fiscal solicitará conocer «los perjuicios concretos causados a los inversores como consecuencia directa de la publicidad de las cuentas anuales presuntamente falseadas». Es decir, el quebranto que pudieron sufrir quienes compraron estos títulos con base en unos resultados contables que no eran los reales ya que, tal y como recoge el juez en el auto por el que ha procesado a ocho exresponsables de la caja (el presidente Modesto Crespo y los dos últimos directores generales, Roberto López y María Dolores Amorós, entre otros) se anotaron beneficios cuando en realidad se arrastraban pérdidas. Los informes periciales encargados por el instructor sitúan esta supuesta falsedad en el ejercicio de 2010 y en los seis primeros meses del año siguiente. La CAM fue intervenida por el Banco de España el 22 de julio de 2011.
Aunque en principio los datos de los cuotapartícipes fueron solicitados a la CAM, la respuesta de la Fundación, que aseguró no disponer de esa información, hizo que se pidieran al Sabadell, quien en su respuesta al juez le recuerda que tras la operación de segregación la CAM «conservó su condición de emisora de cuotas participativas».
La entidad catalana explica al magistrado que no dispone de los datos «referentes a todas aquellas personas que sean o hayan sido titulares de las cuotas participativas por no ser el Banco CAM (ni lógicamente el Banco Sabadell S. A.) el emisor de estos títulos ni haber sucedido o sustituido a la CAM en esa posición de emisor».
No obstante, el banco precisa que «como cualquier otra entidad depositaria de valores que sus clientes depositan a través de cuentas de valores abiertas en la misma, dispone de la información de los titulares de cuotas participativas depositadas en la entidad», que son los 55.000 nombres que contiene el CD enviado al magistrado. Y matiza a continuación que «pueden existir titulares de cuotas participativas que las tengan depositadas en otras entidades de crédito».
El Sabadell aprovecha para hacer saber al juez que «la CAM siguió manteniendo su personalidad jurídica, órganos de gobierno y patrimonio propio y, en especial, su condición de emisora de cuotas participativas».
El juez también reclamó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) una certificación de la fecha y la hora en que se publicaron en su web los estados financieros de la CAM correspondientes al 31 de diciembre de 2010 y al 30 de junio de 2011, así como el listado de las personas que compraron cuotas entre esas dos fechas y cuál fue la cotización de estos valores a lo largo de 2011».
El fiscal pretende cruzar todos estos datos para averiguar cuántos de los que compraron estos valores tomando como referencia unas cuentas que no eran las reales siguen siendo en la actualidad poseedores de unos títulos que en marzo del año pasado fueron amortizados a cero, lo que supone que han perdido todo lo que invirtieron.
