El conflicto de Coca-Cola Iberian Partners ha alcanzado una solución definitiva tras llegar a un acuerdo la compañía con las centrales sindicales al rescindir 423 contratos de los 840 trabajadores afectados por el ERE; otros 325 trabajadores se quedan y el resto ultima su negociación. De estos 325 empleados que se quedan, cerca de 200 pertenecen a la fábrica de Fuenlabrada, y los otros 125 trabajadores que se quedan en la compañía se incorporarán a los centros de Palma de Mallorca, Alicante y Oviedo. La empresa dice «haber concluido» de este modo el cumplimiento del auto de la Audiencia Nacional que solicitaba la reincorporación de los afectados por el ERE de forma inmediata.