El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha archivado una de las piezas que abrió por créditos irregulares contra los responsables del Banco de Valencia, entre ellos su ex consejero delegado Domingo Parra, pese a que el Banco de España ha cifrado en 12,6 millones el perjuicio causado. Parra fue detenido el pasado lunes en el marco de la causa que investiga los préstamos concedidos por Bancaja y el Banco de Valencia a los empresarios de Benidorm Juan Ferri y José Baldó para negocios en México. Tras las declaraciones, Parra quedó libre con la obligación de comparecer mensualmente en el juzgado mientras que los empresarios sigue entre rejas.

En un auto notificado ayer, el magistrado recoge la tesis de la Fiscalía Anticorrupción para concluir que en la «financiación concedida a Royactura no queda acreditada irregularidad alguna relevante desde el punto de vista penal», y que el perjuicio generado «no era previsible» en 2006, cuando se otorgaron los créditos a Royactura para la adquisición de unos terrenos en la localidad madrileña de Móstoles.

Tampoco su refinanciación estuvo «destinada a beneficiar a terceros en perjuicio de las entidades bancarias», sino que se realizó para eludir las consecuencias del concurso de acreedores que solicitó la sociedad en junio de 2009. Pedraz ha tomado esta decisión después de que Anticorrupción apoyara recientemente el archivo que había pedido uno de los imputados, Manuel Setién. Sin embargo, hace menos de un mes, la fiscal Concepción Sabadell se había opuesto ante los «indicios» de que éste podría haber cometido un delito de administración desleal con la financiación otorgada.

Las operaciones consistieron en la concesión de una línea de crédito de 18 millones después ampliada a 40 millones, y en otros cinco créditos otorgados por Bancaja por valor de 20 millones, todos ellos refinanciados tres años después. Con ellas, el Banco de España ya cifró en 2013 un quebranto de 32 millones en diciembre de 2012.