El Sabadell ya tiene todas las bendiciones del supervisor financiero del Reino Unido -la PRA, por sus siglas en inglés- para hacerse con el control del TSB, la filial de Lloyds sobre la que el grupo catalán lanzó una Oferta Pública de Adquisición el pasado mes de marzo, que ya cuenta con la aceptación de más del 80% del accionariado. La llegada de la autorización convierte ahora en «incondicional» dicha OPA, que permitirá a la entidad dar el salto definitivo hacia su internacionalización.

Con la integración del TSB, que cuenta con casi 35.000 millones en activos, el grupo Sabadell pasará a tener hasta el 22% de su volumen de negocio en el extranjero frente al 5% que supone actualmente su filial en Estados Unidos, hasta la fecha su principal mercado más allá de las fronteras nacionales.

A partir de ahora, el banco catalán podrá iniciar la integración de la que será su nueva filial, un proceso que estará capitaneado por el director general de Operaciones y Desarrollo Corporativo de la entidad, Miquel Montes, que cuenta con una amplia experiencia en este campo al haber sido el responsable de los procesos de absorción de la CAM o del Banco Guipuzcoano, entre otros. No obstante, al contrario de lo ocurrido con estos últimos, la intención del Sabadell es respetar al máximo el organigrama actual del TSB -no quieren repetir el error que cometió el Santander en su desembarco en el Reino Unido, aseguran fuentes de la entidad-, por lo que también mantendrán al actual consejero delegado, Paul Pester.

La operación tendrá está valorada en 1.700 millones de libras (2.350 millones de euros), que el grupo presidido por Josep Oliu abonará en efectivo, aunque la factura se verá rebajada por los 450 millones de libras (662 millones de euros) que Lloyds pagará en concepto de compensación por el desenganche del TSB de sus sistemas informáticos. Para pagar el resto, la entidad realizó una ampliación de capital de más de 1.600 millones de euros.

Aunque la marca del TSB se corresponde con una antigua caja de ahorros británica, la actual red de la nueva filial del Sabadell se creó cuando el Gobierno del Reino Unido obligó a Lloyds a segregar parte de su negocio a cambio de las ayudas públicas que recibió al inicio de la crisis, para evitar distorsiones en el mercado. En total cuenta con más de 600 oficinas y una cuota de mercado del 6%.

«Proyecto estratégico»

Como era de esperar, el presidente del Sabadell, Josep Oliu, se felicitó ayer por la llegada de la autorización y destacó que se trata de «un proyecto estratégico de enorme calado» para la compañía. No en vano, considera que el Reino Unido es uno de los mercados que mayores oportunidades ofrece para el negocio financiero en toda Europa.