Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Cuatro de cada diez nuevos empleos en la provincia son a tiempo parcial

La cifra de alicantinos que debe conformarse con un trabajo por horas o de media jornada supera ya los 140.000

El auge de la ocupación a tiempo parcial se consolida en la provincia. La mejora de la actividad y las buenas perspectivas económicas no han impedido que buena parte de los empresarios continúe viendo en esta modalidad de contratación la mejor forma de atender el aumento de demanda sin descontrolar sus costes laborales, lo que ha provocado que hasta el 41,3% de todo el empleo creado en Alicante durante el último año sea únicamente a media jornada o por horas, lo que popularmente ya se conoce como «minijobs».

Así, hasta 10.300 de los 24.900 nuevos ocupados que ha registrado la provincia entre el primer trimestre de 2014 y el mismo periodo de este ejercicio son empleados a tiempo parcial, lo que eleva la cifra total de este colectivo por encima de las 140.000 personas, de acuerdo con los datos de la última Encuesta de Población Activa. Se trata de la mayor cantidad de la serie histórica que publica el Instituto Valenciano de Estadística desde 2005, todo un indicativo de la extensión que está alcanzando el fenómeno.

De hecho, si hasta ahora la inmensa mayoría de estos empleos se concentraban en el sector servicios, durante el último año donde más ha aumentado ha sido en la construcción (+5.000 ocupados a tiempo parcial) y la industria (+4.100), algo que no acaba de cuadrar a los sindicatos. «El trabajo a tiempo parcial puede tener su sentido, por ejemplo, para contratar a un dependiente en un comercio pero no tiene ninguna lógica que se utilice para una cuadrilla de albañiles, que van a emplear el mismo número de horas para acabar la obra, ya lo hagan a media jornada o a jornada completa», destaca la responsable de Empleo de UGT en l'Alacantí, Yaissel Sánchez.

Modelo «low cost»

El responsable del área en CC OO de l'Alacantí, José María Ruiz Olmos, también censura lo que califica como «una generalización de un modelo laboral "low cost", que los empresarios han abrazado con entusiasmo porque ven que, de esta forma, los beneficios aumentan». Y lo hacen tanto por la vía legal -pagando unas horas extra cuando necesitan que sus empleados trabajen más allá de las pocas horas que tienen asignadas por contrato-, como por la vía ilegal, utilizando los empleos a tiempo parcial para cubrirse las espaldas ante una posible inspección pero con los empleados obligados a realizar jornadas maratonianas que cobran en negro. Una situación que los sindicatos se han hartado de denunciar ante las autoridades durante los últimos meses.

Los datos de la EPA también muestra que los «minijobs» ya no son sólo para camareros o trabajadores sin cualificación, sino que cada vez hay más universitarios afectados. En concreto, en el primer trimestre había hasta 38.700 licenciados de la provincia que no lograban emplearse a jornada completa. Por edades, esta tipo de contratación se extiende entre los más jóvenes, los que todavía no han cumplido los 25 años, y entre los mayores de 45 años. Lo que no parece cambiar es la brecha de género: hasta el 72% de los minijobs están ocupados por mujeres.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats