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La nueva subasta de Vissum queda desierta y abre la puerta a la venta por partes

La propuesta de Optical Express, que sólo ofrecía un euro, es declarada nula

El segundo intento de vender mediante subasta pública la cadena de clínicas oftalmológicas Vissum -en concurso de acreedores desde octubre de 2012concurso de acreedores octubre 2012- acabó ayer en fracaso después de que la única oferta presentada, la del grupo escocés Optical ExpressOptical Express, fuera declarada nula al no haber depositado la fianza exigida. De esta forma, a partir de ahora se abre un nuevo proceso de venta directa de los activos de la compañía en el que los interesados podrán realizar ofertas por partes concretas del negocio o únicamente por determinados centros.

Al respecto, desde la administración concursal de la firma aseguraron que ya tienen sobre la mesa diversas propuestas que, en conjunto, cubrirían la mayor parte del grupo y garantizaron que las clínicas continuarán en funcionamiento y atendiendo con normalidad a los pacientes.

Según ha podido saber este diario, entre los posibles compradores se encuentra un grupo de empleados de Vissum, que están buscando un socio de referencia -se baraja la posibilidad de alguna aseguradora del sector sanitario- con el objetivo de presentar una oferta por la mayor parte de los centros y mantener así la esencia de la compañía. En este sentido, también los responsables médicos de algunas clínicas, como la de Almería, ya mostraron su interés por quedarse con el negocio.

Optical Express sólo ofrecía un euro

Tampoco se descarta que la propia Optical Express vuelva a intentarlo aunque para ello tendrá que mejorar la propuesta que presentó ayer, en la que sólo ofrecía un euro por quedarse con todo el grupo y exigía, además, otra serie de condicionantes rechazadas por la administración concursal. Los escoceses fueron, precisamente, los adjudicatarios en la primera subasta de la cadena de clínicas fundadas por Jorge Alió el pasado mes de mayo. Sin embargo, los desencuentros con el médico alicantino por el alquiler de los edificios donde se ubican las clínicas -propiedad de la sociedad patrimonial de Alió- frustraron la operación y obligaron al juez a aclarar el alcance de los activos que entraban en la subasta y a organizar una nueva licitación pública.

En aquella ocasión, además de la compañía escocesa, también participaron el Grupo Arpada, de Madrid, y la consultora local Atalanta Finvesta, que acabó presentando una queja ante el Consejo General de Poder Judicial por los cambios de criterio. Ninguno de los dos ha realizado una nueva oferta en esta segunda puja ni ha manifestado su intención de acudir a la venta directa.

Vissum entró en concurso de acreedores cuando no pudo pagar la abultada deuda de alrededor de 40 millones de euros que arrastraba como fruto de sus planes de expansión durante los años de bonanza económica. El grupo alicantino llegó a contar con 24 clínicas en todo el país pero la crisis económica le sorprendió cuando aún la mayoría de ellas no había entrado en rentabilidad.

Tras un año buscando alternativas, los administradores designados por el juzgado optaron por la liquidación de la compañía liquidación de la compañía mediante la venta de las clínicas.

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