Casi 500 personas se dieron ayer cita en el Palacio de Altamira, con una amplia representación empresarial y política. La cercanía de las próximas elecciones municipales y autonómicas hizo que hubiera desembarco político. «Parece una gala de las de los tiempos de Valenzuela», dijo uno de los asistentes. Y es que, junto a Alberto Fabra,estuvieron el vicepresidente José Císcar; los consellers Máximo Buch, Juan Carlos Moragues y Asunción Sánchez Zaplana; la presidenta de la Diputación, Luisa Pastor; y las alcaldesas de Alicante y Elche, Sonia Castedo y Mercedes Alonso, entre otros. Tampoco faltaron el presidente de la OAMI, Antonio Campinos; el presidente del Consejo Regional de Cámaras, José Vicente Morata; el de Coepa, Moisés Jiménez; el de AVE, Vicente Boluda; los rectores de las universidades de Alicante y Elche, Manuel Palomar y Jesús Tadeo Pastor; el presidente del Puerto, Joaquín Ripoll; el director del aeropuerto, Santiago Martínez Cava; el decano de Fundesem, José Santacruz; y el director general para América del SabadellCAM, Fernando Pérez-Hickman, entre otros.