La factura del rescate de la CAM sigue subiendo, al menos, según las estimaciones del Fondo de Garantía de Depósitos. El organismo que se nutre de las aportaciones del conjunto de entidades financieras acaba de provisionar en sus cuentas casi mil millones de euros adicionales ante el deterioro que sufrieron durante el año pasado los activos incluidos en el Esquema de Protección (EPA) concedido al Sabadell cuando se quedó la caja alicantina, todos ellos vinculados al sector inmobiliario.
De esta forma, el Fondo calcula ahora que este mecanismo le costará en total 3.647 millones de euros durante sus diez años de vigencia -desde julio de 2011, cuando la entidad fue intervenida, hasta el mismo mes de 2021-, frente a los 2.680 millones que estimaba en sus balances de 2012.
En este sentido, la propia memoria del FGD explica que este incremento se debe a las mayores pérdidas previstas en la cartera cubierta por la EPA, de acuerdo con la revisión de la misma que el organismo encarga anualmente a expertos independientes. En este sentido, la evolución de los precios de la vivienda y del suelo han hecho que buena parte de los inmuebles y las participaciones en sociedades vinculadas al ladrillo que el Sabadell heredó de la CAM hayan reducido su valor, lo que explica el aumento de los números rojos.
Así, de los cerca de 24.000 millones de euros que abarca el perímetro del citado Esquema de Protección, el Fondo da por perdidos un total de 8.850 millones frente a los 7.589 millones que calculaban un año atrás. De esta cantidad, los primeros 3.882 millones corren a cargo de las provisiones que ya tenía constituidas la caja alicantina por estos activos, mientras que el resto se divide entre el 80% que debe sufragar el Fondo de Garantía y el 20% que le corresponde al Sabadell.
La factura total
Hay que tener en cuenta que, a esta cifra de pérdidas previstas en la EPA, hay que sumar los 5.249 millones de euros que el entonces Banco CAM recibió para su recapitalización antes de su adjudicación al Sabadell, por lo que el coste total del rescate de la entidad rondaría ya los 14.000 millones de euros.
Desde el grupo catalán no quisieron realizar ayer ningún comentario y remitieron a las declaraciones que sus responsables han realizado anteriormente sobre la cuestión. Es decir, que el deterioro de los activos que recibieron de la CAM no es superior al previsto por ellos inicialmente y que desde un principio tanto el Sabadell, como la Comisión Europea cuando autorizó la operación, ya cifraron en una horquilla de entre 12.000 y 14.000 millones el volumen total que iban a alcanzar las pérdidas de la entidad alicantina. Otra cosa es, apuntan, que el Fondo de Garantía deba reflejar en sus cuentas la valoración de esos activos que se dé cada año de acuerdo con la evolución del mercado.
En este sentido, los balances del FGD también reflejan un mayor volumen de pérdidas previsto en el EPA concedido al BBVA por quedarse con Unnim. Así, el organismo tiene provisionados ya por este segundo esquema 1.201 millones frente a los 885 millones del año anterior.
El Fondo de Garantía de Depósitos es la institución responsable de garantizar los ahorros guardados en las entidades financieras españolas, hasta un máximo de 100.000 euros por titular y entidad, y se financia con las aportaciones obligatorias que realizan bancos y cajas. En 2011 el Gobierno socialista le encargó también asumir el coste de los rescates para evitar que el déficit público se disparara. Sin embargo, Bruselas ha dictaminado que el FGD sí forma parte del sector público -aunque sus fondos no procedan de los impuestos- a la hora de contabilizar dicho déficit.
