El cambio de tendencia del sector inmobiliario ya es un hecho, al menos en Alicante. La fuerte demanda de viviendas por parte de los compradores extranjeros ha permitido a la provincia convertirse en la primera de toda España en la que vuelve a repuntar la construcción de viviendas y está atenuando también la caída de los precios, que ya están cerca de tocar fondo definitivamente. Al menos así lo creen los expertos que ayer participaron en el primer Alicante Real Estate Forum, una iniciativa con la que la escuela de negocios Fundesem pretende incentivar esta reactivación.
«Es el momento de reivindicar de nuevo el sector inmobiliario y de que vuelva a ser un tractor para la economía provincial. Si durante estos años se nos ha señalado como uno de los orígenes de la burbuja, ahora tenemos la oportunidad de que se nos identifique con la recuperación del sector», destacó el vicepresidente ejecutivo de Fundesem, Miguel Rosique.
Sobre la situación actual, el director comercial de la tasadora Tinsa, Íñigo Valenzuela, señaló que 2014 todavía arrancó con un stock de más de 400.000 viviendas sin vender en toda España pero aseguró que, de mantenerse el actual ritmo de demanda, estará completamente absorbido en el año 2017. Dado que desde el momento en que se inicia una casa hasta que está disponible transcurren una media de dos años, «esto significa que los promotores deberían empezar a poner en marcha nuevas obras el próximo año», señaló el ejecutivo.
En el caso de Alicante esta tendencia se ha adelantado casi dos años ya que en 2013 ya se registró un incremento de más del 57% en los visados para la construcción de nuevas casas y en los primeros meses de este año se mantienen los incrementos. «Es la única provincia del país donde ocurre», destacó, por su parte, el director territorial de Tinsa, José Antonio López.
Este repunte en la actividad se sustenta casi exclusivamente en el incremento de las ventas a extranjeros -que sumaron casi 17.500 operaciones el año pasado, un 45% más-, aunque éste no es el único síntoma de mejora que detectan los expertos de la citada consultora. También supone todo un avance que los bancos hayan solicitado en la provincia hasta un 55% más tasaciones durante el primer trimestre del año con el objeto de conceder hipotecas, puede que la primera señal de que se esté empezando a abrir el grifo del crédito. Del mismo modo, aunque los precios siguen cayendo ante la falta de demanda por parte de los compradores nacionales, el descenso ya es mucho más moderado. Así, el metro cuadrado finalizó el pasado mes de marzo con un retroceso en la provincia del 6,1% sobre los precios de un año antes.
La banca, una oportunidad
A este respecto, el presidente de la consultora Activum, Jaime Balaguer, que desde 2010 ha intermediado en la venta de más de 3.000 viviendas, destacó que «la época de los grandes descuentos y las grandes ofertas ya ha acabado. Puede que quede un 2% o un 3% de bajada, pero hay que empezar a vender valor añadido». Balaguer apuntó que la crisis ha permitido barrer a los especuladores y ha creado un nuevo actor principal en el sector, que es la banca. «Las entidades acumulan mucho suelo y buscan socios para darle valor (construir), es una gran oportunidad», aseguró.
El responsable de Activum también señaló que, frente a los grandes titulares de la prensa económica, los fondos de inversión no están adquiriendo grandes cantidades de inmuebles en España, «solo las plataformas para gestionarlos» y que la recuperación en Alicante se está produciendo casi exclusivamente por las compras de los particulares. Por su parte, el socio de Cuatrecasas en Alicante, Francisco Picó, llamó la atención sobre la importancia que tendrá la futura reforma fiscal en la evolución del sector.
