Muchas están en barrios de dudosa reputación o necesitan importantes reformas para ser habitadas, pero entre las más de 55.000 viviendas que la Sareb recibió de las entidades nacionalizadas o con ayudas públicas también hay un buen número de inmuebles de lujo que sus propietarios perdieron al no poder con las cuotas mensuales de la hipoteca o porque sirvieron para avalar alguna aventura empresarial fracasada. El también conocido como «banco malo» ha decidido aprovechar el renovado interés que los compradores extranjeros están mostrando por este segmento del mercado para reunir 35 de ellos en su nuevo proyecto -bautizado con el cinematográfico nombre de «Paramount»- con la intención de rentabilizar al máximo su venta.

Los precios oscilan entre los 300.000 euros de aquellas construcciones más sencillas y los más de tres millones que reclaman por un caserón reconvertido en hotel con encanto en Aiguamurcia, en Tarragona, o por una mansión de casi mil metros cuadrados en Pollença, en Mallorca. En el caso de Alicante, la Sareb ofrece dos viviendas dentro de este lote, ambas ubicadas en Altea.

La primera se encuentra en la Urbanización Mascarat y cuenta con casi 600 metros cuadrados edificados y más de 2.500 de parcela. Sus cinco dormitorios, cuatro baños y cuatro vestidores, además de dos terrazas y de su correspondiente piscina, ya dan una idea del tipo de cliente al que se dirigen. También el precio de partida, que el organismo presidido por Belén Romana sitúa en 1,1 millones de euros.

La segunda vivienda a la venta en Altea es bastante más asequible, con una tasación inicial de 327.000 euros. Su superficie es de 394 metros que se reparten en tres niveles para adaptarse a la pendiente del terreno -en la urbanización El Paradiso-y la propia Sareb señala que sus calidades son de «nivel medio» para este tipo de inmuebles.

Entre el resto de inmuebles fuera de la provincia llama especialmente la atención la venta del Castillo de Biniés, en el municipio oscense de Canal de Berdún, a 35 kilómetros de Jaca. Las zonas más antiguas del inmueble, con casi un millar de metros construidos, datan del siglo XI y fue reconvertido en palacio en el siglo XVI. La Sareb no explica como acabó embargado pero resulta sorprendente el relativamente bajo precio en que se ha tasado: sólo 500.000 euros. En el lado opuesto, entre las casas más normales que se ofrecen, hay varios pisos en la ciudad de Valencia, eso sí, de grandes dimensiones: casi 250 metros cuadrados.

El «banco malo» ha delegado la comercialización de estas propiedades en los especialistas Jones Lang LaSalle y Gilmar.