La economía española se contrajo un 0,3% en tasa intertrimestral durante el tercer trimestre del año y registró una caída interanual del 1,6%, según el avance de datos de Contabilidad Nacional Trimestral publicado este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Los datos del INE difieren en una décima de los esperados por el Banco de España, que en su último boletín económico, publicado la semana pasada, había previsto un descenso trimestral del 0,4% y una caída interanual del 1,7%.

La contracción trimestral del 0,3% experimentada entre julio y septiembre es una décima inferior a la del segundo trimestre, cuando el PIB bajó un 0,4%. Con al dato del tercer trimestre, la economía española acumula cinco trimestres de crecimiento negativo, mientras que, en tasa interanual, el PIB suma cuatro trimestres de retrocesos.

Por su parte, la caída interanual del PIB en el tercer trimestre es tres décimas más acusada que la registrada en el segundo trimestre del año, cuando la economía retrocedió un 1,3%. El INE ha explicado que esta aceleración en el retroceso del PIB es consecuencia de una aportación negativa de la demanda nacional, que se vio compensada sólo en parte por una contribución positiva del sector exterior.

Estadística ha facilitado también el dato acumulado de los tres primeros trimestres del año, que apunta a una caída media del PIB en valores interanuales del 1,2%.

Los datos del INE, aún provisionales, no coinciden, por una décima, con los difundidos por el Banco de España en su boletín económico de octubre. En dicho documento, la institución que gobierna Luis María Linde estimaba un retroceso del PIB del 0,4% en el tercer trimestre del año, y del 1,7% en tasa interanual.

El Banco de España aseguraba que la economía española había prolongando en los meses centrales del ejercicio la trayectoria contractiva que había iniciado un año antes, en un periodo caracterizado por el mantenimiento de condiciones financieras adversas, aunque algo más atenuadas que en el trimestre anterior.

El instituto emisor indicaba que el perfil de la demanda a lo largo del trimestre se ha visto afectado por la anticipación de decisiones de gasto ante la subida del IVA anunciada el 1 de septiembre, y también por el alivio que el plan de pago a proveedores ejerció sobre las cuentas de las sociedades y de los empresarios individuales.