El vicepresidente de la CEOE, Arturo Fernández, ha asegurado hoy que el coste económico y en imagen de una huelga general, si finalmente la Cumbre Social decide convocarla, sería "enorme" para España, por lo que ha pedido a los sindicatos que reconsideren su postura.
En declaraciones a los medios antes de intervenir en un congreso de la Organización de Patronales de Capitales Europeas (OPCE), Fernández ha resaltado que el momento actual sería "el más inoportuno" para convocar un paro general, ya que España "está negociando el rescate virtual y parece que está habiendo una pequeña luz al final del túnel".
Por este motivo, según ha explicado, el presidente de la CEOE, Juan Rosell, "está haciendo gestiones" para intentar que la huelga no se convoque.
Ha añadido que la patronal está en contacto con los secretarios generales de CCOO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, y les ha ofrecido "reconsiderar la convocatoria".
