Los presidentes del Gobierno de España han sufrido, desde Adolfo Suárez, lo que se conoce como el ´síndrome de La Moncloa´, es decir, que en la primera legislatura se centran en los asuntos estatales y en la segunda la centran en la política exterior. Valcárcel ha tardado algunas legislaturas más en padecer este síndrome. El pasado miércoles fue elegido en Bruselas presidente del Comité de las Regiones de la UE, lo que se conoce como el Senado europeo. Ayudará a la Región, aunque advierte de que nadie espere cosas "a pajera abierta"

Tras pasar la mayor parte de la semana en Bruselas, donde el Parlamento europeo por unanimidad le eligió presidente del Comité de las Regiones de la UE, Ramón Luis Valcárcel retomaba el viernes su agenda en Murcia, donde presidió el Consejo de Gobierno y recibió a damnificados por los terremotos de Lorca. La que es la cuarta autoridad del continente, el presidente regional, recibe a La Opinión de Murcia en la sala de San Esteban donde ha instalado el sistema que le permitirá estar en contacto con las autoridades europeas a través de videoconferencia. Allí pasará mucho tiempo en los próximos meses.

-Acaba una semana importante desde el punto de vista político y personal. ¿Qué supone para usted y para la Región de Murcia su nombramiento como presidente del Comité de las Regiones de la UE?

Ha sido una semana importante, sí, pero cuando las cosas son tan previsibles, porque esta semana no ha sucedido sino lo que estaba previsto desde hace dos años y medio, quizás se le quita emoción al evento. Y, por otra parte, yo llevo ya 17 años en el Comité de las Regiones, los mismos que llevo al frente de la Región, y a uno mismo en lo personal le genera menos impacto de lo que la gente puede pensar. Siempre es bonito ver a todos los grupos políticos europeos elegirte por aclamación. Vamos a intentar que sea importante para Murcia, pero el presidente del Comité de las Regiones no hace política pensada exclusivamente en su región. Si los anteriores presidentes hubieran actuado así, el Comité de las Regiones ya hubiera desaparecido hace tiempo. El Comité está para otras cosas y no hay que generar unas expectativas que después no se van a cumplir. Ahora bien, vamos a intentar hacer gestos en favor de la Región, siempre que no vayan en detrimento de otras regiones. Eso es algo que ya hemos hecho en estos dos últimos años, cuando he sido vicepresidente

primero. El Comité de las Regiones ha abierto muchas puertas a Murcia en Bruselas.

-¿Por ejemplo?

Por ejemplo los 21 millones de euros del fondo de solidaridad que vinieron a Lorca para cubrir las emergencias que se originaron tras los terremotos. Estar en el Comité de las Regiones te permite contactar con los comisarios europeos y con Barroso con una fluidez que no sería posible en caso contrario. Otro ejemplo es el préstamo de 185 millones con el Banco Europeo de Inversiones (BEI) para Lorca, con muy buenas condiciones. Ahora trataremos de aprovechar para la reforma de la Política Agraria Común (PAC), y el Comité de las Regiones nos permitirá tener contacto directo con el comisario de Agricultura, Dacian Ciolos. No pensemos que el Comité de las Regiones va a implicar que consigamos cosas para Murcia a pajera abierta. Pero sí que se abren muchas puertas.

-Usted pasa mucho tiempo en Bruselas. ¿Son en la UE conscientes del sufrimiento al que se somete a la población española con los recortes exigidos?

Supongo que sí deben de serlo. Europa es la historia de un proyecto que ha superado muchas dificultades. Alemania lo ha pasado mal. Yo soy crítico con ella, veo un componente hipócrita, pero no todo es blanco o negro en la vida. Alemania un día decidió unificarse, y la Alemania muy rica absorbió a la Alemania muy pobre. Lo pasaron muy mal y aplicaron duras medidas de austeridad. Y ahora dicen, oiga, si yo hice el esfuerzo y tuve manifestaciones en la calle, con el desgaste político y personal que supone, otros también pueden. Lo que no puede ser es que hayamos convertido la austeridad en la panacea. La austeridad es una forma de ser en la vida y en la política. Es un vehículo importante para alcanzar la meta irrenunciable de la creación de empleo y el mantenimiento del estado del bienestar. Hay que combinar las políticas de contención del déficit con las productivas. La política social debe estar por encima de las inversiones. Y lo dice un presidente de Comunidad Autónoma que recibe críticas de los empresarios de la Región por reducir la inversión. Pero es lo que hay. No tenemos ingresos.

-Hacienda está chequeando las cuentas de la Comunidad ante las dudas de que se pueda cumplir el déficit. ¿En qué basa sus dudas Montoro?

Las dudas las tiene con todas las regiones de España. Con algunas más que con otras, eso es verdad. Nosotros partimos con un déficit altísimo, con un 4,4% el pasado año. Hay motivos para dudar sobre cómo vamos a rebajar del 4,4% al 1,5%. Pero yo digo que vamos a hacer todos los esfuerzos posibles para cerrar al 1,5%. Hacienda está analizando las medidas del Plan de Reequilibrio, que hay que aplicar al máximo posible, aunque hay cosas que escapan a nuestra decisión como la venta de edificios. Si no hay gente interesada en comprarlos no podemos hacer nada, aunque no es el caso porque hay bastantes instituciones interesadas en adquirir el patrimonio de la Comunidad que ponemos en venta. En lo que no tengo que depender de nadie, digo aquí con toda la contundencia del mundo que vamos a cumplir con el objetivo del 1,5%. Si no, no tenemos futuro.

-¿Hará falta un segundo Plan Bernal en septiembre?

Si tuviéramos que readaptar el Plan de Reequilibrio, lo haríamos. Para mí es fundamental cumplir con el objetivo de déficit. No quiero pensar en nuevas medidas, porque creo que hemos tomado las adecuadas. El Plan Bernal está en vigor desde hace apenas 15 días. Pero si vemos que no cumplimos con el déficit, pues habrá que tomar nuevas medidas.

-¿Es técnicamente posible una intervención de la Comunidad Autónoma por parte del Estado?

Todas las comunidades podemos ser intervenidas. Si no cumples el déficit, el Estado te obligará a tomar medidas. Eso es la intervención. No van a llegar unos señores vestidos de negro con unos maletines, con gafas de sol, como los de Caiga Quien Caiga, para echarnos de los despachos a pescozón limpio. En la práctica, todas las comunidades autónomas estamos intervenidas, porque el Estado nos obliga a tomar decisiones que en circunstancias normales no adoptaríamos.

-Si se produjera la intervención, ¿dimitiría?

Entonces Zapatero y Rajoy tendrían que haber dimitido varias veces. Tú, como comunidad, perteneces a un Estado que te exige que tomes medidas. Y como país perteneces a una unión de estados que también te obliga a aplicarlas por el bien general.

-¿Tiene previsto su Gobierno solicitar ayuda al fondo que ha creado el Gobierno para ayudar a las comunidades autónomas?

laro que sí, estamos deseando, esperemos que para septiembre esté disponible. Pero que nadie piense que nos van a regalar el dinero, las condiciones van a ser durísimas. Por dar una aproximación, se pedirían entre 200 y 300 millones. Pero no lo sé todavía.

-Los ciudadanos ya empiezan a tomar la calle para protestar por los recortes...

Lo respeto, porque soy demócrata, pero también pienso que las manifestaciones se podían haber hecho antes. Se manifiestan contra un Gobierno que toma decisiones y no lo hicieron contra otro Gobierno que negaba la crisis. Al final se ha instalado en la gente la idea de que la crisis la ha causado Rajoy. Lo que está claro es que la gente está muy enfadada y está en todo su derecho. Cuando trabajas más y cobras menos, te enfadas.

-Han tomado ustedes medidas que negaron en campaña, como la subida del IVA...

Cuando Zapatero subió el IVA, hubo menos respuesta. Y ahora hay más respuesta. Aunque reconozco que el Gobierno siempre dijo que no iba a tomar esa medida y la ha tomado. Yo creo que es lo que está cabreando a la gente. Esto es lo que enfada. No voy a hacer esto, pero ahora voy y lo hago. Me lo han impuesto, es verdad, pero a lo mejor nosotros teníamos que haber entendido que Zapatero tomó algunas medidas, las que tomó tarde y mal, por exigencia de Bruselas y habérnoslo pensado dos veces antes de hacer la crítica fácil. Y no me duelen prendas en decirlo. Ya se sabe que donde las

dan, las toman.

-A la gente también le duele que se tarde tanto en tomar medidas de recorte que afectan más a los políticos, como los sueldos, lo que se tarda en reducir entes públicos...

Yo no estoy de acuerdo. Llevo cinco años con el salario congelado y he sufrido varias reducciones, la última hace unos días. He perdido mucho poder adquisitivo. En cuanto a los entes públicos, es que eso no se hace en una semana. Liquidar una empresa pública lleva su tiempo. Y hemos reducido más de lo que dijo Beteta [secretario de Estado de Administraciones Públicas, que habló de que sólo se habían eliminado dos].

-En el PP se quejan mucho de la herencia recibida. Pero en Murcia llevan gobernando ustedes 17 años y es una de las comunidades con más déficit...

La Región de Murcia tiene un déficit alto, pero también es la cuarta comunidad autónoma menos endeudada. ¿Por qué el déficit? Porque los ingresos han sido tan insuficientes que no han llegado a cubrir los gastos imprescindibles. Si nos hubiéramos endeudado y tuviéramos déficit alto, sí que se nos podría acusar de despilfarro. Hasta el año pasado, en la Región hemos hecho autovías, colegios y hospitales. Ese es nuestro déficit. Y cubrir las necesidades de tantas personas que hemos atendido y queremos seguir atendiendo en los próximos años.