La Comisión Europea (CE) presentará antes de fin de año propuestas legislativas para crear un supervisor bancario europeo para las más de 8.300 entidades del continente y los fondos comunes de garantías de depósitos y de reestructuración y liquidación bancaria.

Según el último borrador de conclusiones de la cumbre europea de hoy y mañana, en el apartado de estabilidad financiera y crecimiento en la Unión Económica y Monetaria, los líderes dicen que hay países de la eurozona y otros dispuestos a ir más allá en sus esfuerzos por coordinar e integrar sus políticas económicas, respetando plenamente la integridad del mercado único y la de la UE en su conjunto.

En este sentido, subrayan que la estabilidad financiera es un "prerrequisito" para el crecimiento y señalan que el informe del presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, al respecto aporta importantes ideas.

"La creación de un marco financiero integrado es particularmente importante para la zona del euro, dadas las profundas interdependencias que resultan de la moneda única", indican.

En una alusión que podría estar dirigida al Reino Unido, los líderes recalcan que esta visión solo se puede hacer preservando la unidad y la integridad del mercado único "en el campo de los servicios financieros".

Manifiestan que, mientras el marco financiero "debería cubrir a todos los Estados miembros de la UE, también habría de permitir diferenciaciones específicas entre países del euro y otros en áreas que están predominantemente vinculados al funcionamiento de la unión monetaria y a la estabilidad del euro más que al mercado único.

En este contexto, los jefes de Estado y de Gobierno consideran que las propuestas ya presentadas sobre la reestructuración y liquidación de bancos y garantías de depósitos deberían ser aprobadas antes de fin de año.

En base a estas iniciativas, la CE entregará antes de finales de 2012 más medidas legislativas para una supervisión bancaria única a nivel europeo "cubriendo todos los bancos", un esquema europeo de garantías de depósitos y un esquema europeo de resolución bancaria.

Además, los Estados miembros que participan en el Pacto Euro Plus se comprometen a profundizar más la coordinación de sus políticas económicas, dentro del espíritu del acuerdo y del semestre europeo, con el fin de mejorar la competitividad, el empleo, la sostenibilidad de las finanzas públicas y la estabilidad financiera.

Los países identificarán objetivos concretos comunes y diseñarán y desarrollarán sus compromisos a nivel nacional.

En el último borrador de las conclusiones que los mandatarios comunitarios prevén aprobar mañana, se ha eliminado la mención a que los líderes garantizan la entrada en vigor del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) para el 9 de julio.