La exconsejera de la CAM Rosa Ana Perán afirmó en su comparecencia en las Cortes que aunque es una auditora con "experiencia" no es "una superwoman" y, por ello, fue incapaz de detectar en los balances de la caja alicantina irregularidades que, a su juicio, no habría podido ver ningún "profesional". Al contrario de Navarro y Pacheco, Perán aseguró que el consejo de administración, en su reunión del 14 de diciembre de 2010, nunca fue informado del requerimiento del Banco de España alertando de la situación financiera de la caja.

Perán era presidenta de la Asociación de Industriales del Calzado de Elche cuando tomó posesión de su cargo como vocal del consejo de administración de CAM en sustitución del fallecido Juan Francisco Cerdán, presidente de la Cámara de Comercio de Orihuela.

Perán reveló que cobró 21.718 euros en los dieciséis meses que estuvo en el cargo, que aceptó en un acto de "responsabilidad" y cuyas funciones desempeñó siempre "conforme a derecho". Tras Perán compareció el también exconsejero Ginés Pérez, quien achacó la intervención de CAM a "una concatenación de situaciones y de cosas que hacen que ésta, que es la cuarta caja de España, haya acabado así. Veinte no nos cargamos la caja", manifestado con la intención de exculpar a los consejeros.