Alemania vuelve a rebajar las expectativas de sus socios del euro. El ministro germano de Finanzas, Wolfgang Schäuble, rechazó ayer una nueva ampliación del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), tal y como reclaman algunos expertos y como sugirió también el secretario del Tesoro estadounidense, Tim Geithner, en la última cumbre del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial. "Le dimos los instrumentos para que pueda intervenir en caso de ser necesario. Después vamos a utilizarlo con eficacia, pero no tenemos la intención de reforzarlo", defendió Schäuble sobre la posibilidad de aumentar la dotación del citado fondo.

El ministro alemán se pronunciaba de esta forma después de que la Comisión Europea admitiera que se habían producido algunas conversaciones "informales" para estudiar dicha posibilidad. "La Comisión tiene una mente abierta. Estamos considerándolo. El aumento en la financiación del FEEF es uno de los asuntos que actualmente están siendo considerados y debatidos", afirmó el portavoz comunitario para Asuntos Económicos y Monetarios, Amadeu Altafaj.

"Siempre hemos dicho que deseamos reforzar el FEEF, tanto en su uso como en su actual importe" de capital disponible, agregó Altafaj. No obstante, el portavoz señaló que todavía es prematuro para hablar de cantidades.

Amadeu Altafaj se refería de esta forma a una información de la cadena BBC que aseguraba que los gobiernos de la eurozona estudian la posibilidad de ampliar el fondo de rescate, incluso para que llegue hasta los dos billones de euros. Los estados europeos confían en contar con el plan dentro de cinco o seis semanas, según la BBC, que también afirmó que la iniciativa que está "emergiendo" en la eurozona contemplaría una quita del 50% de la deuda de Grecia por parte de sus acreedores.

Para que este plan se pueda llevar a cabo, se permitiría que el Banco Central Europeo (BCE) facilitara préstamos junto con el fondo. El FEEF asumiría el mayor riesgo, el de prestar a los Estados en dificultades y reducir de esta manera los riesgos para el BCE.

El Fondo Europeo de Estabilidad Financiera está en proceso de aumentar su capacidad a 440.000 millones de euros. Los parlamentos de los países de la eurozona están actualmente ratificando su reforma y la ampliación de sus poderes, de manera que pueda actuar de forma preventiva, contribuir con préstamos a los gobiernos para recapitalizar bancos e intervenir en el mercado secundario de deuda.

Los rumores de una posible ampliación del fondo generaron ayer un conato de crisis en la coalición de gobierno en Alemania. El socio menor de la coalición, el Partido Liberal (FDP), había amenazado con votar en contra de la aportación alemana al fondo en caso de que no se hiciera claridad sobre ese punto.

crisis helena

Almunia asegura que no existe un "plan B" para Grecia

El comisario europeo de Competencia, el español Joaquín Almunia, aseguró ayer que el plan diseñado para evitar la suspensión de pagos de Grecia es la única opción, y añadió: "No hay plan B. Si cae en impago desordenado estamos perdidos. Todos pagaremos las consecuencias". Almunia alertó de que "no hay posibilidad de establecer una barrera para que no nos llegue el impacto de un 'default' -suspensión de pagos- desordenado de Grecia". "Es la tapa del lavabo que se levanta y no hay quien frene la tendencia del agua a irse por el agujero", aseguró el comisario español a modo de ejemplo. A pesar de ello, Almunia afirmó en su intervención inicial en estas jornadas que no se plantea una suspensión de pagos en Grecia porque no conviene a nadie. Por otra parte, el comisario criticó la lentitud con la que los líderes europeos están adoptando las decisiones necesarias para salir de la crisis. El exministro español reclamó a los jefes de Estado que dejen a un lado los nacionalismos. efe barcelona