El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, dijo hoy que, a título personal, le parece "escandalosa" la gestión de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), tras conocerse que su ex directora general María Dolores Amorós ha sido despedida por una gestión deficiente.

Fernández Ordóñez se expresó así durante una rueda de prensa celebrada para dar cuenta del proceso de recapitalización financiera que concluía hoy, y en relación al despido de Amorós por parte de los nuevos administradores de la caja alicantina, al "buscar el beneficio propio, falsear las cuentas y realizar una gestión deficiente" cuando fue directora general.

Por desempeñar ese cargo, al que accedió a finales de 2010 cuando la entidad estaba inmersa en su fusión en el grupo Banco Base, recibía una retribución anual de 593.040 euros, además de una renta vitalicia de 369.497 euros por ejercicio.

Además, se le acusa de presentar de forma engañosa los resultados de la entidad, que ganó 39,8 millones de euros hasta marzo y tras su intervención arrojó unas pérdidas de 1.136 millones en los seis primeros meses de 2011.

En este sentido, el gobernador del Banco de España dijo que aunque a título personal le parece "escandalosa" la gestión de la entidad, ahora el organismo que él dirige y el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) lo que tienen que hacer "es ajustarse a derecho".

"Hay un protocolo que hay que seguir", añadió el gobernador, quien recordó que tras la intervención de la entidad, hay que investigar la gestión que se ha llevado a cabo y abrir expedientes en el caso de que haya que hacerlo, pero llevar a cabo el proceso "con un cuidado exquisito".

"Hay que ser escrupuloso aunque entiendo que la gente se escandalice", manifestó.

"Como uno no haga bien las cosas y reaccione por las tripas, no se hará bien", reconoció Miguel Ángel Fernández Ordóñez, quien no descartó que la intervención de la caja alicantina le cueste dinero al ciudadano, ya que "cuando peor es una caja, ésta vale menos", y "estamos hablando de la CAM, que es lo peor de lo peor".

Al respecto, explicó que el Banco de España decidió intervenir la caja porque no era viable, a diferencia de otras entidades como las catalanas o la gallega, que se decantaron por la entrada en su capital de FROB como vía para recapitalizarse.

"Lo importante ahora es enviar el mensaje de que el Banco de España está en la caja y que en el futuro, tras su adjudicación, "entrará alguien serio", concluyó.