El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y de UGT, Cándido Méndez, coincidieron hoy con el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, en culpar del aumento del desempleo en España al sector financiero y "la asunción de riesgos innecesarios e inadmisibles en el sector de la construcción".

Tanto el ministro de Trabajo como los secretarios de CCOO y UGT hicieron esta consideración durante su intervención en el curso "El nuevo sistema financiero, las nuevas infraestructuras y el nuevo mercado laboral", en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE).

Durante su intervención, el ministro de Trabajo explicó que el elevado desempleo que existe en España se explica "casi exclusivamente" por el "desplome" de la construcción. Y es que, según recordó, del 75 % de los parados, es decir 3 de cada 4, corresponden a este sector o aquellos relacionados con este área.

Según aseguró el ministro, aunque en España "no tenemos el mejor mercado laboral y la mejores instituciones del mundo", éstas no son las causantes del paro, una cuestión que según matizó "tienen más que ver con el comportamiento con el sector financiero español y la asunción de riesgos innecesarios e inadmisibles en el sector de la construcción".

Preguntados por este asunto, el secretario general de CCOO explicó que existe "una importante" responsabilidad en el aumento del desempleo compartida tanto por las entidades financieras que apoyaron la burbuja inmobiliaria como por los diferentes gobiernos y el Banco de España, que debería haber conocido lo que se generaba alrededor de este sector y no tomaron ninguna medida, lo que amplificó sus efectos.

Además, y sobre la reforma del sistema financiero, Ignacio Fernández Toxo también criticó la idea que se nacionalicen las cajas de ahorros con dinero público y luego se privatizan mediante subastas al mejor postor.

De la misma manera se expresó el secretario de UGT, quien señaló que es "una evidencia" que el sector financiero español propició la burbuja inmobiliaria.