El sector hortofrutícola español calcula que sufre una pérdida de unos 200 millones de euros semanales después de que desde Alemania se haya señalado a las plantaciones españolas como la fuente de infecciones de la bacteria 'E. coli enterohemorrágica'.

El presidente de las Cooperativas Hortofrutícolas españolas, Cirilo Arnandis, asegura que los productos españoles están recibiendo de vuelta los envíos realizados hace unos días sin que éstos lleguen a su destino y ha anunciado que se ha creado un gabinete de crisis que se reunirá en el Ministerio de Medio Ambiente dos veces por día, en sesiones de mañana y tarde.

Cirilo Arnandis ha explicado que el origen de estas infecciones está en la manipulación de los pepinos en la propia Alemania, ya que se trata de una bacteria que se puede transmitir por el aliento y, en ese caso, también se hubieran detectado infecciones en agricultores y consumidores españoles.

El presidente de las cooperativas ha reiterado que esta cepa no está en España y ha apuntado que el mercado español cuenta con "los protocolos de trazabilidad más estrictos" para determinar el origen de un problema esta naturaleza, pero ha aclarado que los agricultores españoles no pueden ser los responsables del tratamiento de los productos en Alemania.

Además, Arnandis ha acusado a las autoridades alemanas de "saltarse todos los protocolos de la seguridad alimentaria de la Unión Europa, sin ningún motivo que justifique y argumente que el problema de origen esté en España".

Cirilo Arnandis ha mostrado su deseo de "transmitir tranquilidad" a los consumidores, pero ha condenado que los productores alemanes se aprovechen de la coyuntura para vender sus pepinos con un identificativo de su salubridad al no contener dicha bacteria.

Por su parte, el presidente de la Unió de Llauradors, Ramón Mampel, ha lamentado que otros países como Austria, a parte de Alemania, "hayan cortado" sus importaciones españolas, y ha pedido que se siga la trazabilidad del producto porque, ya sean verduras o frutas, todas tienen manipulación y transporte en cámaras.

"Se puede llegar hasta el final porque tenemos asumida la trazabilidad en todos los productos, ya que durante la cadena de producción y distribución se marca por qué manos ha pasado, por dónde se ha transportado y en qué cámaras ha estado", ha comentado.

Mampel ha relatado que la Comunidad Valenciana exporta diariamente 10 millones de euros al resto de España.

El presidente de la Unió ha deseado que el problema "se solvente y se solucione lo más rápido posible" y ha señalado la importancia de detectar con toda la precisión posible el origen y controlar totalmente la infección que transmiten esos pepinos.