La Cámara de Comercio ayudará a los pequeños establecimientos a crear su propia web y, además, subvencionará la mitad del coste de este servicio. Así lo anunció ayer el gerente de la institución, Carlos Mazón, quien aseguró que, "a pesar de que hace diez años que todos tenemos claro que hay que estar en la red", la presencia del pequeño comercio sigue siendo muy reducida.

Mazón citó diversos estudios recientes para defender que Internet ya se ha convertido una de las principales fuentes de información para los consumidores y una de las más influyentes a la hora de decidir sus compras. "Nueve de cada diez internautas confía en las recomendaciones que le hacen sus conocidos en las redes sociales y siete de cada diez en las de otros usuarios aunque no los conozcan. Es más, un 35% de los consumidores consulta la web antes de realizar un gasto importante", explicó el gerente de la Cámara. Además, considera que Internet puede ser un "revulsivo" para contribuir a la reactivación del sector, muy afectado por la crisis.

En este sentido, la institución ha colaborado con la empresa alicantina Crehaz para poner en marcha, a partir del próximo lunes, este servicio, que también incluirá formación para que el comerciante pueda gestionar de forma totalmente independiente la web, según explicó el portavoz de la citada firma, Juan Seguí.

En concreto, la Cámara ofrecerá a los pequeños comercios cuatro posibilidades distintas que van desde el diseño de una web básica para tener presencia en Internet, hasta la apertura de una plataforma de venta "on line", pasando por la puesta en marcha de un blog en el que los clientes puedan recomendar el establecimiento o la creación de un catálogo virtual en el que los posibles compradores puedan conocer los productos antes de adquirirlos.

En cuanto al precio, la creación de una web básica costará unos 600 euros, frente a los entre 1.000 y 1.500 que, según Carlos Mazón, vale en el mercado y con la subvención de la Cámara se quedaría en 300 euros. El servicio más caro, la plataforma de venta "on line", tendrá un coste final de 625 euros.

El objetivo de la Cámara es llegar a unos 200 pequeños comercios en el primer año de funcionamiento de este nuevo servicio, que se sumará a los que ya ofrecía habitualmente para este sector. Entre ellos, el presidente de la Comisión de Comercio Interior de la Cámara, Antonio Sáez, destacó el de diagnóstico de punto de venta, en la que los técnicos de la institución aconsejan a los establecimientos sobre qué mejoras pueden realizar para conseguir más ventas. Ambos programas cuentan con un presupuesto de 150.000 euros.

"Ahora lo que importa es la conversación"

El responsable de Crehaz, Juan Seguí, señaló ayer que la rentabilidad de un negocio en internet depende de la destreza y lo activo que se muestre el comerciante. "Ahora lo que cuenta es la conversación, la interacción con los posibles compradores a través de foros, de redes sociales", apuntó el también empresario. No obstante, Seguí aseguró que "la gente a lo que concede más importancia es a lo que opinan otros usuarios" y de ahí el auge de las redes sociales y la importancia de estar bien posicionados en ellas. Por eso, afirmó, "hay empresarios que no le sacan ninguna rentabilidad a la red y otros que se mueven y consiguen que el negocio virtual sea más importante que el real". Una de las ventajas que tiene la herramienta que proporcionará la Cámara es que permitirá a los comerciantes gestionarse la web "sin necesidad de ser esclavos de la consultora o la empresa" que ha creado el sitio. El desarrollo del programa informático necesario para ello ha llevado más de dos años de trabajo a sus diseñadores. d.n. alicante