El Gobierno griego decidió ayer tramitar de forma urgente nuevas medidas de ahorro, para conseguir 28.000 millones de euros hasta 2015, que incluyen recortes en los sueldos de los funcionarios públicos y en las pensiones, un aumento de impuestos y privatizar puertos y empresas estatales. Así lo confirmó en Atenas el portavoz del Gobierno Yorgos Petalotís, tras una extensa reunión del Consejo Ministerial bajo la presidencia del jefe del Ejecutivo griego, Yorgos Papandréu.

"En tiempos cruciales es necesario avanzar a grandes cambios en el país y en la economía para sacarla de la crisis", dijo Petalotís al justificar las impopulares medidas que los griegos deben poner en marcha para seguir recibiendo ayuda externa. "Nuestros esfuerzos son para salvar al país y al prestigio de Grecia y la credibilidad para tener perspectiva", añadió.

"El Consejo decidió medidas adicionales para 2011, de 6.000 millones, para lograr reducir el déficit fiscal al 7,5% del Producto Interno Bruto (PIB)" y "se aplicarán otras medidas de 22.000 millones de euros dentro del trienio 2012-2015, para que el déficit baje al 3% en 2014 y al 1% en 2015", precisó el portavoz.

Papaconstantínu declaró que el Consejo decidió privatizar inmediatamente sus acciones estatales en el banco de Correos (Post Bank), el puerto de Salónica, el servicio de agua potable de Salónica y la empresa telefónica OTE "para llevar adelante un ambicioso programa de privatizaciones". Petalotis declaró que "el objetivo es crear un superávit primario del 6% para que la deuda se reduzca a un nivel Europeo".