La agencia de calificación crediticia Moody's considera que un impago de la deuda soberana de Grecia tendría implicaciones adversas para otros países de la eurozona, así como para la banca griega, independientemente de los esfuerzos que se realizaran para que se llevara a cabo de manera ordenada.

"Un 'default' probablemente tendrá implicaciones adversas para el 'rating' de Grecia y de otros emisores soberanos europeos bajo presión, así como para la banca griega, sin importar los esfuerzos que se hagan para que se produzca de manera ordenada", advierte la agencia, que apunta que el impacto de una suspensión de pagos por parte de Grecia sería "difícil de predecir y de controlar" y afectaría a la solvencia y los 'ratings' de toda Europa.

En este sentido, la calificadora de riesgos señala que "cuanto más tiempo persista la actual incertidumbre sobre Grecia, mayor será la tentación tanto por parte de las autoruidades griegas como de la eurozona de llevar a cabo algún tipo de reestructuración, en otras palabras, una suspensión de pagos", advierte la agencia.

Este 'default' podría asumir, según Moody's, diferentes formas, incluyendo cambios en los términos y condiciones, un 'reperfilamiento' selectivo, así como mediante recompras 'voluntarias' de deuda a gran escala con grandes descuentos.

De este modo, la agencia advierte de que en el caso de producirse el impago de Grecia, otros países periféricos de la eurozona se verían afectados, independientemente de la fórmula de 'default' empleada, lo que conllevaría una creciente polarización de los 'ratings' soberanos en Europa, con los países más fuertes conservando las notas altas, y los países más débiles con dificultades para mantenerse dentro del grado de inversión.