El Gobierno de Estados Unidos comunicó ayer al Congreso de este país que ya ha alcanzado el techo máximo de endeudamiento al que está autorizado, 14,3 billones de dólares (unos diez billones de euros), por lo que ha empezado a tomar medidas para evitar quedarse sin liquidez. La primera de ellas fue la de suspender las inversiones que tenía previstas en dos planes de pensiones públicos. Ahora el Congreso tiene hasta agosto para elevar el techo de gasto y evitar la suspensión de pagos.
