Un vecino de Caravaca de la Cruz ha pedido al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número Uno que libere unas fincas de la hipoteca que pesa sobre ellas, constituida en el año 1891, por la que está obligado a pagar un gravamen "en monedas de plata o de oro". La hipoteca aún continúa en vigor porque hasta ahora nadie se había ocupado de su cancelación. efe murcia