Los accidentes "in itinere" descienden la mitad que los siniestros en jornada laboral

La movilidad a la hora de acudir al puesto de trabajo es cada vez mayor, por factores diversos como tener que acudir a polígonos industriales situados fuera de las ciudades o residir en zonas alejadas de las áreas urbanas porque la vivienda es allí más económica. En cualquier caso, se trata de motivos para tener que realizar desplazamientos más o menos largos, que pueden haberse intensificado con la crisis, por el miedo a perder el empleo. Con ello, ha crecido el riesgo de sufrir un percance durante estos trayectos.

El incremento en la relevancia de los accidentes "in itinere" en la provincia también se refleja en el hecho de que el territorio de la Comunidad Valenciana donde menos han descendido los de consideración grave. Así, si en 2009 se habían registrado 43, el año pasado fueron 39. En términos relativos, supusieron un 36% de todos los ocurridos en la autonomía, mientras que el año anterior Alicante concentró menos del 30% de esos siniestros. Mientras tanto, se mantuvo igual la cifra de accidentes de tráfico mortales camino del trabajo o a la vuelta, con cinco siniestros a lo largo del año.

Con todo, no deja de ser un hecho, y muy postivio, que el número de accidentes se redujo, y además de una forma bastante más elevada que en el conjunto de España. Esto también indica cómo la seguridad vial se vigila cada vez más en estos desplazamientos. Las cifras de siniestralidad "in itinere" de la provincia de Alicante están entre las más altas del país, pero resulta lógico por el volumen de población. Es más, en algunas demarcaciones con menos habitantes, como Málaga, Sevilla y Murcia, se produjeron más percances, lo que da una idea de cómo la movilidad de los trabajadores es allí todavía mayor.

A lo largo de 2010 se registraron en toda España 73.961 accidentes "in itinere", apenas un 3,8% menos que el año anterior. El número de siniestros aumentó en las provincias de Sevilla, Teruel, Zaragoza, Asturias, Salamanca, Soria, Barcelona, Girona, Lugo, Navarra, Álava y La Rioja, así como en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Del total de accidentes, 1.171 fueron graves, mientras que la cifra de siniestros mortales se situó en 181. Esta última, aun siendo un 6,7% inferior a la de 2009, refleja cómo este factor de riesgo está presente en el terreno laboral. Huesca, Ávila, Soria, Lleida, Ceuta y Melilla fueron los únicos lugares donde no falleció ningún trabajador durante estos desplazamientos. El descenso de los accidentes mortales fue muy significativo sobre todo en Cataluña, que sin embargo se mantuvo con la cifra de siniestralidad más elevada. En cambio, los percances con fallecidos aumentaron de manera preocupante en Madrid, Galicia y Andalucía.

CC OO alerta del posible aumento de la presión en el trabajo

Desde el sindicato CC OO advierten de un posible incremento de la presión en el trabajo, debido al contexto de crisis, y en cómo eso puede suponer un mayor riesgo de padecer un accidente de tráfico en el viaje de regreso al domicilio. El portavoz de la organización en Alicante, Salvador Roig, sostiene también que el aumento en el volumen de trabajo, como consecuencia de la reducción de plantillas, puede ser otro factor que eleve el nivel de estrés y, en consecuencia, el peligro de sufrir un siniestro "in itinere". En todo caso, y al margen de los posibles motivos, el sindicato recuerda que esta problemática ha sido planteada en reiteradas ocasiones a las administraciones competentes, y que su creciente importancia se pone de relieve con cuestiones tan destacadas como la puesta en marcha de una campaña específica por parte del Ministerio de Trabajo. A. T.