La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha constatado que los supermercados han mantenido las promesas realizadas y que, "salvo contadas excepciones", las enseñas de distribución apenas han repercutido a los consumidores la subida del Impuesto del Valor Añadido (IVA) que entró en vigor el pasado 1 de julio.

En todo caso, la organización de consumidores advierte de que el hecho de que los supermercados no hayan repercutido el alza impositiva en los precios no implica que no lo vayan a hacer en el futuro, cuando los productos que vendan ya hayan sido comprados con el nuevo tipo impositivo y los consumidores hayan "bajado la guardia".

Según indica esta organización, las cadenas están "en plena guerra comercial", tratando de ofrecer mejores precios al consumidor, y la subida de este gravamen les ha permitido ofrecer un "argumento comercial de reclamo", que supone no tener que bajar los precios como hacían hasta entonces.

Para llegar a esta conclusión, la OCU ha analizado en 12 grandes cadenas los precios de una muestra amplia de productos un mes después de la subida del IVA. "Hemos visto un mantenimiento de los precios, alguna bajada por ofertas o subidas debidas al fin de las mismas o en porcentajes que no se ajustan a la subida del impuesto", concluye la organización.

Entre los motivos para justificar el no encarecimiento de los precios de venta al público, la organización señala el mantenimiento del tipo superreducido en el 4%, y el incremento del reducido en un 1%, "que los distribuidores pueden asumir o soportar al menos durante un periodo de tiempo".

Además, la OCU apunta a que ha existido cierta "vigilancia", entre los consumidores y en los medios para ver si los precios cambiaban alrededor del 1 de julio, con lo que las cadenas, dado que el anuncio del incremento del IVA se hizo con meses de antelación, han podido ir planeando su traslado bien con mucha antelación o posponerlo hasta un momento en que pase más desapercibido.

Posible subidas

En este sentido, la organización de consumidores advierte de que el hecho de que los supermercados no hayan repercutido el alza impositiva en los precios no implica que no lo vayan a hacer en el futuro, cuando los productos que vendan ya hayan sido comprados con el nuevo tipo impositivo y los consumidores hayan "bajado la guardia".

También matiza que, en algunos casos, puede ser que hayan ido repercutiendo la subida antes de su entrada en vigor, mediante subidas leves o que cesen realizar rebajas como hasta entonces hacían para captar a los consumidores y lanzar el mensaje de que ellos "congelan" los precios.