Los consumidores afrontan desde ayer el incremento de precios de los servicios y suministros esenciales regulados, como la electricidad, el gas, transportes, y de otros parcialmente intervenidos por la Administración, como la cuota por tener teléfono fijo.

Las principales novedades de cara a este ejercicio corresponden a la tarifa eléctrica, que subirá una media del 2,8 por ciento para los hogares, equivalente a 0,74 euros al mes, en línea con el IPC.

Según el indicador adelantado del IPC armonizado, la inflación cerró este año en el 2,7 por ciento, mientras que el IPC de noviembre, último dato conocido fue del 2,6 por ciento.

La estructura de tarifas aprobada por el Gobierno introduce nuevos tramos en función de la potencia contratada y prevé que, desde julio de 2007, se hagan revisiones trimestrales del recibo de la luz en función de los costes de la generación eléctrica, que representa el 64 por ciento de los costes total.

En cuanto al gas natural, las tarifas domésticas suben el 2,2 por ciento, lo que supone una media de 0,87 euros al mes para el consumidor con calefacción y 0,27 euros para el resto del uso doméstico. El recibo del gas se revisa cada tres meses, por lo que estos precios estarán vigentes hasta el 31 de marzo.

La popular bombona de butano, cuyo precio también se actualiza trimestralmente, costará entre enero y abril un máximo de 11,78 euros, un céntimo más que hasta ahora. La cuota de telefonía fija que Telefonía cobra a sus abonados por tener el servicio, sube un 2 por ciento, hasta los 13,8 euros al mes, el máximo permitido por la Comisión Nacional del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT);.

Por contra, sube el salario mínimo interprofesional y se rebajan algunos tramos del IRPF.