Esta carta es una iniciativa institucional puesta en marcha por el CSD y que contempla los valores y principios básicos que deberán asumir y respetar todas las entidades y organizaciones deportivas que la suscriban en sus futuros proyectos, actuaciones y prácticas deportivas, adquiriendo el compromiso de proteger el medio ambiente y el desarrollo sostenible.

El escrito nace del compromiso adquirido por la Estrategia Nacional sobre Deporte y Sostenibilidad, elaborada el pasado mes de junio por el CSD, el Ministerio de Medio Ambiente, a través de la Fundación Biodiversidad y el Comité Olímpico Español (COE);, con la colaboración de la ONG Green Cross España.

La Carta Verde consta de cuatro capítulos y 39 puntos, "buenas intenciones" como las calificó el secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, y cuyo principios y preceptos están inspirados a nivel global por la Declaración de la Cumbre de Río de Janeiro de 1992 y, en el ámbito deportivo, por la 'Estrategia Michezzo' sobre el Deporte y el Medio Ambiente y la 'Agenda 21' impulsada por el Comité Olímpico Internacional (COI);.

Además, el documento tiene carácter vinculante para todos los que lo rubriquen y entre los compromisos que las empresas están dispuestas a asumir como la integración a nivel institucional de los principios de desarrollo sostenible, implantación de criterios de integridad y cohesión social, procesos de participación, promoción y divulgación del desarrollo sostenible y la colaboración con otros agentes relacionados.

Por otro lado, el CSD creará una unidad específica para estos temas y fomentará el Observatorio de la Carta Verde del Deporte Español, cuyo objetivo será fomentar, recoger y difundir todas las experiencias desarrolladas por las organizaciones suscriptoras, las cuales podrán optar a un Premio Deporte Sostenible.

De todos modos, esta Carta Verde es de momento un borrador como señaló Inmaculada Martín Caro, directora general de Infraestructuras del CSD. "Ahora se establece un periodo de reflexión de todos los agentes implicados para recoger las observaciones oportunas para que la Carta Verde sea ese referente común del deporte comprometido con el desarrollo sostenible", indicó.

LISSAVETZKY: "DEBEMOS SER SOLIDARIOS CON LAS GENERACIONES FUTURAS".

Por su parte, Jaime Lissavetzky felicitó a todos los que habían trabajado en la redacción de este documento y recordó que el Comité Olímpico Internacional había pedido la semana pasada durante la Conferencia sobre Medio Ambiente y Deporte celebrada en Pekín "la colaboración de las administraciones".

El presidente del CSD, que espera que sean muchas las entidades que suscriban esta Carta Verde, advirtió que el medio ambiente genera "un apasionante debate" en la sociedad y que "la responsabilidad medioambiental es la de ser solidario con las generaciones venideras".

El dirigente recalcó que el medio ambiente es uno de los temas básicos de cualquier candidatura olímpica y puso, a modo de ejemplo, los problemas con la contaminación que están teniendo los organizadores de Pekín 2008, pese a que China es uno de los países con mayor crecimiento. "Los poderes públicos tienen la obligación de coordinar este desarrollo y qué tipo de energías usar", subrayó.

Finalmente, Lissavetzky indicó que las cinco líneas de la carta eran "la sensibilización, las buenas prácticas, la educación y la formación, la investigación y el desarrollo, y la colaboración del sector privado".

Por su parte, Alejandro Blanco, presidente del COE, resaltó que uno de los tres pilares del Movimiento Olímpico es "el medio ambiente" y que por ello la presentación de la Carta Verde era "importante". "El medio ambiente está en la sociedad en el presente y en el futuro", sentenció.