El consejo de administración del Elche hizo ayer efectivas las cantidades que reclamaban los ex jugadores Mario Gómez y Gastón Casas, desvinculados del club el pasado 30 de junio, por lo que el Elche no tuvo ningún tipo de traba administrativa para continuar en Segunda División. Ambos jugadores, que habían denunciado al Elche en la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE);, reclamaban 117.830 euros, una cantidad que según el club era muy inferior.

Con Mario se llegó pronto a un acuerdo e incluso ha aceptado algún pagarés, mientras que Gastón Casas reclama una cantidad que el Elche piensa que no debe abonarle. De momento, esa cantidad se ha depositado en la Liga de Fútbol Profesional, para evitar el descenso, pero espera recuperar. «Como no estábamos de acuerdo en el pago de ese dinero al futbolista será la Liga la que decida, pero pensamos que no tiene derecho a ello», confesaba ayer José Moya, director general del Elche.

El resto de los integrantes de la plantilla del año pasado, tanto los jugadores que terminaban contrato como los que continúan en el club, aceptó los pagarés que les ofreció la directiva.