Regreso triunfal de Isco a su casa, al que fue su estadio, para terminar de finiquitar cualquier atisbo de esperanza para «su» Málaga, condenado a un descenso a Segunda División al que sólo falta ponerle fecha. El Real Madrid se paseó por La Rosaleda con la victoria (1-2) cómoda ante un Málaga incapaz de hacer cosquillas a su potente rival a pesar de las rotaciones, sacando los tres puntos con los goles de Isco y Casemiro para volver a verse en la tercera plaza de LaLiga Santander después de la jornada 32.

Los de Zinedine Zidane bajaron las revoluciones después de la Champions y encontraron la calma en casa del colista, abocado ya sin remedio a Segunda a 14 puntos de la salvación con 18 en juego. El técnico galo rotó, dejó en casa pesos pesados, y venció con Navas casi inédito para aprovechar la derrota del Valencia.

El Madrid se alzó a la tercera plaza, dos puntos por encima de los «che» y a cuatro del Atleti, con una sesión de spa y relajación, en comparación con la pesadilla con final feliz ante la Juventus el pasado miércoles. Ese penalti en el minuto 93 que aún colea y que dio el pase a semifinales de la Champions, ese duelo no apto para cardiacos, dio paso a un partido con poco historia ni tensión.

El conjunto blanco disfrutó de buena profundidad por bandas desde el inicio, con Lucas Vázquez y Asensio. Benzema, faro arriba sin Cristiano Ronaldo, volvió a sufrir la falta de acierto que le lastra esta temporada, pero Isco se encargó de abrir la lata a la media hora. El jugador malagueño pidió perdón a la afición local tras su gran gol de falta y quizá por la manera de someter al equipo que le vio nacer como futbolista.

Isco perdonó otras dos ocasiones antes del descanso, mientras que el Málaga tuvo la más clara del partido justo antes del 45, cuando Casemiro perdió un balón de Navas e Iturra perdonó en el mano a mano con el meta costarricense. La segunda parte no cambió el guión de un partido controlado por el Madrid.

Los de José González apenas encontraron opciones arriba, pese al desparpajo de Rolán, mientras Zidane dio minutos a Ceballos y Mayoral. Cumplieron los menos habituales, aunque ya con el segundo en el marcador obra de Casemiro, encargado de robar en el centro del campo y rematar una buena jugada de Benzema e Isco. Le sobró esa última media hora al partido de La Rosaleda.

La grada se quedó incluso sin ganas de su interminable sentimiento de queja por la triste temporada y el Madrid perdonó el tercero, en especial con una buena contra que no logró terminar Ramos. El Málaga encontró un tanto, de Rolán tras un no despeje del joven Vallejo, que ni supo a honra tras el paseo de los blancos por el sur en el reencuentro de Isco con el que fuera su equipo. «Estoy contento con su partido y su gol. Es su casa y ha hecho un gran partido. Me alegro por él y por el equipo. Es de la casa y se merecía este recibimiento. Ha sido un jugador importante para el Málaga y hoy lo es para el Real Madrid», señaló Zidane al final del partido sobre el malagueño.

Números de leyenda

Con el triunfo de ayer, Zidane alcanzó su victoria número 100 en el banquillo del Real Madrid, en el que se ha sentado en un total de 140 partidos entre todas las competiciones. La inmensa mayoría de triunfos del técnico francés se han producido en LaLiga, ganando 66 partidos de 99.