No se conocen precedentes en el deporte mundial de élite. Fernando Belasteguín (Pehuajó, Argentina, 19 de mayo de 1979) afronta su decimosexta temporada consecutiva como número uno del pádel profesional.

Metódico y riguroso en el trabajo como muy pocos, vuelve a Alicante de la mano de Pablo Lima dolido en su orgullo por la derrota en el primer torneo del año del World Padel Tour (WPT) y promete la mejor versión de los números uno en el pabellón Pedro Ferrándiz, con la garra y agresividad que les faltó en Badalona.

A punto de cumplir los 39 años, Bela ensalza la doble pista instalada en el pabellón alicantino y recalca que serán su cuerpo y la naturaleza los que le dicten cuándo debe colgar la pala porque la ilusión y las ganas de competir las mantiene intactas.

«Llegamos muy motivados a Alicante, con otra sensación distinta a la de Badalona», explica Bela en el club Blupadel tras el último entrenamiento previo al debut. «Quizás pecamos de seguir en la misma dinámica en la que acabamos el año pasado y nos faltó el hambre que nos caracteriza. Y los adversarios, como hemos dicho estos años, son todos muy muy buenos y cuando hacen las cosas mejor que tú tienes que ver por qué fue. No sé si vamos a ganar en Alicante, pero se verá una versión distinta, que es la de morder en cada punto como en los años anteriores».

Con todo, el jugador argentino relativiza la derrota frente a la dupla de nuevo cuño formada por «los Juanes» -Lebrón y Belluati- y tiene asumido que, en su caso, todo lo que no sea levantar el trofeo de campeón suena a fracaso. «No hay ansiedad.

Se perdió el primer torneo, no cinco o seis consecutivos», argumenta. «Son más ganas de hacerlo bien. Sabemos que todo lo que no sea salir campeones para nosotros es un fracaso y otras parejas ya festejan llegar a determinadas instancias. Son dos horizontes distintos. Ya tenemos una edad que nos permite manejar la ansiedad».

En cuanto a las nuevas parejas que irrumpen en el circuito, Belasteguín también opta por la cautela y recuerda que el nivel del padel profesional «siempre ha sido muy alto».

Satisfecho por la entrada de las cámaras de Gol Televisión en el WPT, el número uno del mundo se felicita por la creciente profesionalización del circuito y pone como ejemplo este Abierto de Alicante: «Que se pongan dos pistas centrales es un paso muy grande para el espectáculo, para el espectador, los jugadores y el pádel. Es un gran esfuerzo presupuestario montar dos canchas, gradas más personal. Año tras año, el pádel se profesionaliza y la entrada de la tele, que es lo que pedíamos a gritos hace años, se ha consolidado y este deporte tan joven va copiando de otros más afianzados para intentar imitar su éxito. Hoy tenemos el mejor circuito que ha existido nunca, porque mejora cada año».

Bela se declara encantado de volver a Alicante -«estamos tan a gusto que parece que no nos hemos ido nunca»- y añade que su retirada la marcará su resistencia física: «Sé que cada vez me quedan menos años como profesional y será mi cuerpo el que me diga cuándo tengo que dejarlo porque mentalmente y a nivel de ilusión quiero seguir aprendiendo todos los años. Será la naturaleza la que me marque cuándo dejo de jugar, pero cada año que arranca tengo ganas de disfrutar».