Encuentro para enmarcar de Lafuente y Rivero y victoria sufrida ante un combativo Canoe que a punto estuvo de sorprender al HLA Alicante. No fue un partido para sentirse orgulloso por los graves momentos de desconexión de los alicantinos, pero el equipo sí demostró jugar con cabeza los instantes finales a base de defensa y cabeza fría en ataque, principalmente de Lafuente y Rivero, auténticos protagonistas de la victoria de ayer. El espíritu guerrero que transmitió el equipo en los últimos compases también da pie a mirar el futuro y la inminente visita a Granada con mayor optimismo.

Para la preocupación queda los dos parciales de 0-10 en el segundo y en el tercer cuarto. Demasiados minutos sin baloncesto en los que el rival pudo causar males mayores de no ser por el empeño de Rivero, que firmó un final del tercer cuarto antológico. La vuelta de Lobo tras superar su lesión también fue positiva. De menos a más cogiendo sensaciones y aportando en momentos de atasco. Importante también resultó el rebote de Kingseley (8) y, como no, sus 3 espectaculares tapones junto con los de Amadou Sidibe.

No fue un partido sencillo. El Canoe no dejó tiempo para el descuido. Ya en el primer cuarto el conjunto madrileño plantaba cara obligando a Varela a pedir su primer tiempo muerto pese al buen arranque de su equipo. Era sólo un aviso de que no era un encuentro para el relax. Salió el HLA Alicante con la lección aprendida en el segundo cuarto y, con un parcial de 16-4, el marcador reflejaba un aparente tranquilizador 35-25. Pero ni mucho menos había nada resuelto. El Canoe endosa un 0-10 que al final se amplió a un duro 2-17 tras encadenar los madrileños buenas jugadas de ataque para llegar al descanso con un 37-42. Preocupación máxima en la grada por el horroroso final del segundo cuarto.

Lobo y Rivero protagonizan el inicio de un tercer cuarto marcado por el triple desde 8 metros de Herrero. El HLA Alicante queda conmocionado y de nuevo encaja otro 0-10. La crisis volvió a tener su reacción. Rivero y Lafuente, ambos incombustibles, no permiten que haya más sangre y siguen con su exhibición de lucha y entrega. Lafuente, 18 puntos, 7 rebotes, 4 asistencias, 6 faltas recibidas y 33 de valoración. Es vital en el equipo. El último cuarto fue de infarto y el partido no se decidió hasta el último minuto y medio cuando un triple de Lafuente comenzaba a despejar el camino. Le siguió Lobo y Tomás Fernández, convertido ayer en triplista, para acabar con la incertidumbre y sumar la victoria número 12 de la temporada. La plantilla le dedicó la victoria a LaGuerre, que abandonó la disciplina lucentina, y a Boubacar Sidibe, que dijo adiós a la temporada por su lesión.