Un gol del lateral cubano Yoan Balázquez a falta de siete segundos para el final y una posterior parada de Javi Santana, tras un tiempo muerto solicitado por Zupo Equisoain, permitieron al Teucro eliminar al BM Benidorm (28-24) en la tercera ronda de la Copa del Rey, gracias al valor doble de los goles en campo contrario. Al equipo alicantino lo condenó su pésima primera parte. Muy errático en la finalización y excesivamente blando en defensa, el Benidorm vio como su rival, mucho más enchufado, le pasó por encima en la primera parte (13-4, descanso), apoyándose en las paradas de un espectacular Javi Santana -65 por ciento de acierto al descanso-. La bronca de Equisoain en los vestuarios tuvo que ser tremenda porque sus jugadores saltaron a la pista con otra actitud. Y aunque en defensa no mejoraron demasiado, sí lo hicieron en ataque. Su desventaja se movía en los siete goles, por lo que aún seguían vivos en la eliminatoria -en su pista habían ganado 31-27.

El técnico del Benidorm, viendo que su equipo aún tenía vida, cambió al portero. Y varias paradas del montenegrino Mijuskovic hicieron daño al Teucro, incapaz de encontrar solución a la doble mixta sobre Balázquez y Borja Méndez que había ordenado el técnico visitante. A los pontevedreses se le había esfumado su ventaja. Quique Domínguez pidió tiempo muerto. Pero el Benidorm ya le pisaba los talones a su equipo. Con 27-24, el Benidorm disfrutó de un ataque para asegurarse su pase faltando poco más de un minuto. Falló y Balázquez puso el 28-24 en la siguiente acción. Equisoain pidió tiempo muerto. Su equipo, sin portero y con cinco segundos para atacar, buscó un lanzamiento desde el lateral pero Javi Santana sacó una gran mano para detener el lanzamiento abajo de Ander Torrico.