El Real Madrid aspira a convertirse en el primer equipo que reedita el Mundial de Clubes. En el regreso de la competición siete años después a Emiratos Árabes Unidos, y con el cartel de gran favorito encara las semifinales ante el anfitrión, el modesto Al Jazira.

Después de convertirse en el primer club en la historia de la Liga de Campeones que conquistó dos ocasiones seguidas el trofeo de mayor prestigio, el equipo de Zinedine Zidane encara un nuevo reto y la posibilidad de firmar un nuevo récord. Nadie conquistó dos Mundiales de Clubes seguidos y sería el broche perfecto a un 2017 repleto de alegrías para el madridismo.

Tras recuperar el trono perdido en la Liga y conquistar la Champions, las Supercopas de Europa y España aumentaron en el presente curso a cuatro los títulos del 2017, que los jugadores del Madrid quieren cerrar en Abu Dabi en cinco, en la que sería la conquista de su tercer Mundial de Clubes para igualar a su eterno rival, el Barcelona.

Para el estreno en la competición recupera Zidane a jugadores importantes y tiene opciones para decidir en varias posiciones. Lo primero, el regreso de Bale, superadas las molestias el sóleo izquierdo. Apunta a reaparecer durante la competición pero no directamente de titular, por lo que Isco regresará a su posición. También Varane se ha recuperado a tiempo.

El Gremio de Brasil ya espera en la final tras vencer ayer en la prórroga al Pachuca mexicano (1-0).