En mis 14 temporadas en el Elche y ocho en el primer equipo no tuve «afortunadamente» la oportunidad de disputar muchos derbis frente al Hércules porque nosotros estuvimos la mayoría de los años en Segunda División y ellos estaban en Segunda B.
Son partidos partidos en los que sales más motivado y quieres ganar, sobre todo, para darle una alegría a la afición. Es una semana especial y diferente y sólo deseas que llegue la hora del encuentro. Da igual como juegues y la clasificación. Hay que salir a muerte porque lo único que quiere la afición es que ganes porque el rival es el Hércules.
Al encuentro de esta tarde, ambos equipos llegan con la necesidad de sumar la victoria porque vienen de rachas negativas. En los últimos encuentros, el Elche ha bajado su rendimiento después de comenzar muy bien la Liga, pero en un derbi no importa la clasificación, ni el momento en el que te encuentres. Ojalá que gane el Elche.
Por su parte, el Hércules ha reaccionado bien desde la llegada a su banquillo de Claudio, aunque en los últimos partidos no está del todo fino.
Va a ser un encuentro muy igualado que, si no rompe al principio, algo que sería raro, los dos equipos va a ir con muchas precauciones porque nadie querrá perder. Claudio es mi amigo y tengo una buena relación con él, pero mi corazón es franjiverde y quiero que gane el Elche.
