El Alcoyano visita el Camp Morvedre para medirse al Saguntino el único rival que consiguió arrebatarle los seis puntos el pasado curso. La singularidad del terreno de juego, artificial y de reducidas dimensiones, dificulta más si cabe la empresa de finalizar el año a domicilio con victoria. La plantilla de Galiana, amparada en la filosofía de no mirar más allá del siguiente rival, se ha propuesto erradicar en Sagunto la dinámica negativa de dos puntos de nueve posibles.

La única vía, partiendo de la base de que el equipo mantendrá la solidez defensiva lejos de El Collao, pasa por el reencuentro con el gol tras 270 minutos sin marcar, una losa que ha puesto tierra de por medio con la zona de promoción. «Sabiendo que enfrente vamos a tener un rival complicado esperamos seguir siendo un equipo fiable fuera de casa», dijo Galiana. Sobre cómo prevé el duelo dijo que «va a ser un partido diferente en lo que se suele dar en la media de Segunda B. El registro futbolístico en ese campo es muy particular y el que mejor se adapte con sus respectivas dosis de suerte tendrá mucho a favor. Esperamos hacer un buen partido y traernos los tres puntos».