El Real Madrid visita esta noche San Mamés obligado a ganar a un Athletic Club en crisis y con la duda de Kepa Arrizabalaga, del que se habla como próximo fichaje blanco, para no verse de nuevo alejado de la cabeza de la tabla, tras recortar dos puntos y quedarse a ocho, en su persecución al Barcelona.

El equipo de Zidane, arrollador en los cursos anteriores, tiene sus problemas esta temporada. Pero en La Catedral se encontrará a un rival en situación mucho más delicada tras ser abatido el miércoles en el mismo San Mamés por un rival de Segunda B, el Formentera, que le dejó fuera de la Copa del Rey.

Fue esa derrota una muestra más de lo que le está costando plasmarse en algo sólido y creíble el nuevo proyecto que lidera desde el banquillo Cuco Ziganda, que se había ganado el ascenso al primer equipo con seis buenos años en el Bilbao Athletic, pero al que se le agota el ya escaso crédito que le daba el entorno rojiblanco cuando tomó el relevo del añorado Valverde.

Cuco no acaba de dar con la tecla y el Athletic se desangra poco a poco en un curso que arrancó con una eficaz clasificación para la fase de grupos de la Liga Europa, pero que después le está resultando un calvario en la Liga y en Europa.

Aunque lo peor fue la eliminación copera en una semana que puede ser clave en el futuro a corto y medio plazo del Athletic, ya que después de recibir al Madrid, los leones tendrán que ratificar su continuidad en Europa puntuando en Ucrania ante el Zorya Luhansk.

Para este sábado, Ziganda recuperará al equipo titular, del que prescindió casi al completo frente el Formentera, aunque con la duda de si Kepa, lesionado en un tobillo, se recupera del esguince y puede jugar de inicio. Si el meta, al que se apunta como nuevo jugador blanco ya incluso este enero, no puede jugar, lo hará Iago Herrerín.

Ziganda tiene las bajas del sancionado Laporte y de los lesionados Yeray, Muniain, Beñat y De Marcos.

Mientras, el Madrid busca la regularidad perdida y comenzar a buen nivel un diciembre que se antoja decisivo para su temporada. A la posibilidad de levantar su tercer título del curso con el Mundial de Clubes se le añaden duelos de grandeza en la Liga ante Athletic, Sevilla y el clásico frente al Barça.

De esos tres resultados dependerá el futuro del conjunto de Zidane en la competición doméstica, obligado a ganar si no quiere decir adiós a la defensa de la corona liguera antes del 2018. A domicilio ha pasado de establecer un nuevo registro histórico, con 13 triunfos consecutivos en Liga, a una mala racha tras su derrota en Girona y el empate en el Wanda.

Las sensaciones no sonbuenas para el equipo de Zidane que esta semana llega de vencer con sufrimiento al Málaga con la primera unidad (3-2), y ceder en Copa un sonrojante empate la segunda en el Bernabéu, ante un equipo de Segunda B como el Fuenlabrada (2-2). No alineó titulares Zidane en Copa, por lo que cuenta con su once de gala descansado.

Unzúe vuelve al Camp Nou

Del resto de la jornada, previa a la última jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones que se juega el martes y miércoles próximos, destaca el duelo entre el líder Barcelona y el Celta en el regreso al Camp Nou del técnico celtiña Juan Carlos Unzúe. A su vez, el Atlético recibe a la Real Sociedad y el Sevilla al Deportivo de A Coruña.