El ciclista oriolano Javier Gil (16/09/1996) lucirá el maillot del equipo vasco Baqué de nuevo la próxima campaña. Escuadra que cumplirá 40 años de presencia ininterrumpida en el pelotón, ahora asociada como copatrocinadora de BH.
Después de un año de aprendizaje "en el que al principio me costó adaptarme" Javier Gil ha realizado una temporada bastante completa en el Baqué-BH y ha logrado crecer como ciclista. "A mitad de campaña empecé a sentirme bien, hice varios buenos puestos en las vueltas a Bidasoa, Navarra y Castellón y en las carreras de verano me vi ahí adelante con los mejores. Me faltó rematar en alguna carrera, pero no estuve lejos", relata Gil antes de señalar que "de cara a 2018 voy a seguir trabajando duro para dar otro paso hacia adelante, ganar en regularidad y poder estar luchando por las victorias y ayudar al equipo en todas las pruebas". Va a ser su cuarto y último año en sub 23 y "mi sueño es dar el salto al profesionalismo". Cualidades no le faltan para conseguirlo en un mundo complicado por falta de escuadras que apuesten por los más jóvenes.
Javier Gil reconoce que "correr en el Norte me ha hecho crecer y me ha dado madurez. El nivel de competencia es muy grande y eso te ayuda a ser mejor ciclista. Noto mi progresión en las vueltas, y en la montaña donde antes lo pasaba peor. Lo he trabajado mucho y la mejora ahí está. Estoy convencido de que el próximo año voy a seguir mejorando".
El corredor oriolano pasó la mayor parte de la temporada 2017 viviendo en el pueblo vizcaíno de Berango, donde Baqué-BH tiene su residencia. "Costó al principio estar fuera de casa y adaptarse al clima, pero enseguida me integré gracias a unos compañeros magníficos y a un equipo que siempre está a tu lado apoyándote" afirma Javier Gil que sigue soñando con dar el salto al profesionalismo, por lo que lleva luchando muchos años. "Ese es mi sueño y no voy a cesar en mi empeño de conseguirlo", concluye.
