Eslovenia ganó, contra pronóstico, su primera medalla de oro en el Eurobasket 2017, después de ganar por 93-85 a Serbia en una final que será recordada durante mucho tiempo por la lucha y entrega de los jugadores de los dos equipos.

Goran Dragic, autor de 35 puntos, y el madridista Luka Doncic con una torcedura de tobillo, mediado el tercer cuarto, fueron los mejores, junto con Prepelic de una Eslovenia que luchó con una energía y fe infinitas. El partido estuvo repleto de igualdad, pero Eslovenia, verdugo de España, llegó al tramo final con su líder fuera de combate, Doncic, y con otro extenuado, Dragic. Serbia supo encontrar la brecha para devolver el partido a la igualdad, 77-76, con casi seis minutos por delante. Una canasta de Macvan devolvió a Serbia a positivo, 77-78, desde el final del primer cuarto, pero Eslovenia, supo encontrar en la fe la energía necesaria para acabar ganando por 93-85 y proclamarse campeona de Europa por primera vez.

A la conclusión del partido, el esloveno Dragic fue elegido el jugador más valioso (MVP) del torneo, mientras que el español Pau Gasol entró en el cinco ideal.