El Balonmano Benidorm consiguió ayer su primer triunfo de la temporada en la Liga Asobal ante un Frigoríficos Morrazo que no pudo aguantar el pulso táctico y físico de los alicantinos y acabó desmoronándose en los últimos diez minutos (31-27).

El conjunto de Zupo Equisoain, que sigue invicto como local desde su llegada al banquillo, tuvo en el cubano Robles, autor de siete dianas, y en el portero rumano Makaria a sus jugadores clave en la fase decisiva del partido.

El equipo gallego, que vivió en ataque de la inspiración de Potic y Muratovic, dominó el juego en la primera parte, en la que marcó el ritmo del juego con unas posesiones siempre al borde del pasivo, pero muy efectivas.

El juego del Morrazo descentró a la defensa del Benidorm, lo que obligó a Equisoain a sustituir al portero Mijuskovic y a solicitar un tiempo muerto que despertó a su equipo en defensa, aunque el conjunto gallego se retiró a los vestuarios con ventaja (14-16).

En la segunda parte, el Balonmnano Benidorm, con un fondo de banquillo más profundo que el de otras temporadas, elevó el listón de su juego defensivo y brilló en ataque, donde sobresalieron Grau y Robles.

El Morrazo aguantó el tirón mientras Potic (siete goles) y Muratovic tuvieron fuerzas. El encuentro ganó en intensidad física y contacto y ahí salió perdedor el conjunto gallego, que llegó sin fuerzas ni recursos a los últimos minutos, en los que el Benidorm fue una apisonadora.

Los goles de Pabán y las paradas de Makaria dieron la puntilla al Morrazo y permiten al Benidorm sumar su primera victoria, además de poner tierra de por medio en la clasificación con un rival directo por la permanencia.