Virtualmente clasificado para disputar la promoción de ascenso a Segunda A, el entrenador del Alcoyano, Toni Seligrat, se felicitó ayer por la «merecida» victoria de su equipo, que también sirvió para cerrar la herida de la derrota previa en El Collao ante el Saguntino y recobrar confianza de cara al inminente «play-off», que puede ser una realidad matemáticamente el próximo fin de semana. «Ganar al Hércules en su casa no es nada fácil. Lo hemos conseguido y lo hemos merecido haciendo tres goles en este campo, que es tan difícil», destacó Seligrat.

«El partido era muy importante porque veníamos de una derrota en casa que podría haber sembrado alguna duda sobre lo que este equipo es capaz de hacer», añadió el técnico del Deportivo. «Teníamos, además, bajas importantes, pero se ha demostrado que somos un equipo con mayúsculas y que, entre quien entre, se parte el pecho por el Alcoyano y por el escudo. El equipo no baja el nivel», agregó.

Seligrat, que elogió el gran partido de Ángel con sus dos goles -«ya le he dicho que me lo llevaba a casa, pero no sé si mi mujer lo que rrá en adopción», bromeó-, también destacó la aportación de sus jugadores de refresco José García, Pau Bosch y Joan. «Siempre digo que los partidos los ganan los jugadores que lo acaban, no los que lo comienzan. Y tienes que tenerlo en cuenta a la hora de hacer el equipo para que dé un paso adelante si tienes algún problema. Sólo teníamos dos cambios del primer equipo, Jose y Pau, y nos han hecho crecer y nos han aportado ese plus».

Por su parte, el técnico del Hércules, Carlos Luque, lamentó la «mala suerte» de los suyos en la primera mitad. «Ellos, sin tirar a portería, han marcado sus dos primeros goles. El Hércules ha hecho muchas cosas bien, pero el segundo tanto de ellos fue clave y luego el tercero marca la ansiedad del grupo. Un resumen de la temporada», explicó.

«El fútbol son resultados, no se analiza el trabajo ni cómo pasan las cosas. Desde mi posición lo veo diferente. Nada que reprochar a los chavales. Se dejan la vida y muy pocas veces obtienen recompensa», indicó Luque, que disculpó a sus jugadores y negó que su equipo hiciera el ridículo en ningún caso.