El Alcoyano comenzará hoy a preparar el próximo compromiso liguero frente al Hércules tras ceder en el momento más inoportuno la primera derrota de local en año y medio y con la necesidad de reencontrarse dos meses más tarde con los tres puntos a domicilio para apuntalar la segunda plaza. El cuadro de Seligrat, no obstante, debe corregir con urgencia errores del pasado para obtener el que sería tercer triunfo consecutivo en el feudo de la capital de la provincia.

Y es que, pese a la solvencia defensiva de la que hace gala el cuadro de El Collao últimamente ha cometido acciones infantiles que se han traducido en goles absurdos que, en definitiva, han privado de aumentar la puntuación y de pelear por el campeonato.

El entrenador del Alcoyano, Toni Seligrat, que ya calificó «de cine cómico» el tanto recibido en la última salida al campo del Ebro, volvió a ser testigo de una acción similar en la reanudación del choque contra el Atlético Saguntino que a la postre derivó en el primer tanto visitante.

«A nosotros no nos puede pasar. A un buen equipo no le puede pasar, es no estar concentrado, no estar en el partido», dijo el preparador valenciano que explicó con detalle el malentendido. «La pelota estaba en manos de nuestro guardameta, que no se dio cuenta de que el árbitro no había pitado fuera de juego, se la dio al central que tampoco se había dado cuenta. Estamos hablando de Marc Martínez, que tiene 27 años, y de Tomás Ruso, por encima de los 30. La falta directa acabó en gol y a partir de ahí nos hizo un daño tremendo porque veníamos de otros partidos que nos habían hecho goles que no tenían que haber sido. Son nuestros más que del rival», concluyó Seligrat.

Con todo, el Deportivo pasa por ser junto con el Badalona el segundo equipo del grupo III menos batido (28), superado únicamente por un líder Barcelona B (27) que camina con paso firme hacia el ascenso.