El delantero mauritano del Eldense Cheikh Saad asegura que ha recibido «llamadas desde números privados que amenazan a mi familia para que no dé los nombres de los jugadores implicados». En ese sentido, el ariete deportivista precisa que «en todas esas llamadas que he recibido con amenazas me hablan en español».

Cheikh también confirma que «son cuatro» los compañeros del Eldense que están involucrados en los presuntos amaños de partidos, y que él se enteró de todo tras el encuentro: «Me dicen que hay jugadores que han apostado en contra del equipo, entonces voy al vestuario y me lío a gritos con ellos», asegura.

Una vez en casa, el delantero vio el resumen del partido, donde varios futbolistas del Eldense terminaron llorando: «Algunos lloraban de impotencia, de lástima, pero otros eran lágrimas de cocodrilo, unos farsantes. Mejor que se dediquen al teatro en lugar de jugar al fútbol», señala.

El propio Cheikh lamenta que la afición esté viviendo esta situación «porque no se lo merece, para nada», y afirma que «el domingo no sé con qué cara iré a jugar, y eso que yo no he hecho nada. Imagínate los otros».

Las palabras del mauritano dejan entrever la división existente en el vestuario azulgrana tras el choque ante el Barcelona B (12-0) que hizo saltar todas las alarmas con respecto al amaño de partidos. En ese sentido, Alberto Carbonell afirma: «No sé nada de lo que está pasando, estoy flipando», al tiempo señala que el vestuario deportivista «es muy atípico, cada uno va por un lado, pero no me gustaría que nos salpicara nada», del mismo modo que Guille Smitarello, quien comenta que «lo único que he visto es que se pide que investiguen. Soy ajeno a todo lo que está saliendo sobre apuestas, nadie me ha hecho ninguna proposición sobre nada».

Apuestas desde Asia

Fuentes próximas a la investigación aseguran que la Policía y la LFP barajan la posibilidad de que el mayor flujo de apuestas llegara desde Asia. Además, la principal cuota sospechosa es la que está relacionada con el 8-0 con el que se llegó al descanso.

Sin embargo, Alessandro Zanier, portero del Eldense que tuvo que recoger doce veces el balón del fondo de su portería señala que «a mí nadie me ha ofrecido realizar alguna apuesta, para mí sería una vergüenza».

El delantero Adrián García «Tabala» está «alucinando con todo lo que está saliendo, pero mi conciencia está muy tranquila porque no tengo nada que ver», mientras que Hugo de Marchi afirma que «si tuviera la certeza o me hablaran de apuestas se lo diría rápidamente a los directivos».

De ese modo, la plantilla azulgrana aguarda una investigación que ha puesto al Eldense en el foco de todas las sospechas.