El portero Javi Díaz, que se erigió en protagonista indiscutible del partido con 26 paradas, dio el triunfo a su equipo (30-29) al detener un último lanzamiento desde la línea de penalti a Simonet, que habría supuesto el empate anoche para un Benidorm muy duro en defensa que salió a por todas, pero que vuelve a ser el «farolillo rojo» de la Liga Asobal tras la derrota en en su visita a Valladolid.

Los vallisoletanos salieron muy serios en el plano defensivo y ese buen trabajo defensa-portería les permitió también controlar el juego de ataque, con una buena circulación de balón y una buena lectura de los lanzamientos, que se tradujo en un parcial de 7-3 en el minuto 10. Pero el Benidorm reaccionó.

Zupo Equisoain tuvo que pedir un tiempo muerto para reorganizar a su equipo y ese parón tuvo como consecuencia una mayor intensidad defensiva del Benidorm. El conjunto alicantino redujo diferencias (10-9), pero Cuartero veía la roja directa al lanzar un penalti a la cara del guardameta local, lo que terminó de impulsar a los vallisoletanos, que se fueron al descanso con ventaja 17-12.

El Benidorm no estaba dispuesto a ceder más terreno y salió en tromba tras la reanudación, con un juego más agresivo en ataque, que le permitió reducir la ventaja local a dos goles (18-16). La diferencia se redujo a la mínima expresión, tras una primera reacción vallisoletana (22-21), pero los locales supieron templar los nervios y controlar la presión hasta el milagro de la parada final de Javier Díaz.